¡Que se arme el ca... bailongo! Silverio nos cuenta lo que traerá en 2019
Saquen las trusas rojas porque llegó Su Majestad Imperial. Checa esta entrevista con Silverio donde nos cuenta todo de su nuevo disco.
Por: Eduardo García Manríquez
Público conocedor, esta vez armamos una entrevista con Silverio, quien está estrenando nuevo disco y trae bastante pila para poner a bailar a la Ciudad de México durante todo este año. ¿Le entran o se pandean?
La escena musical chilanga no es homogenea, acá le bailamos duro y macizo porque parece que lo traemos en un gen místico aportado por el esmog y el estrés capitalino. No quisiera caer en el cliché que reza “chilango que se respeta…”, pero esta vez será necesario: si vives en la CDMX, alguna vez tuviste que ir a ver un show de Silverio, si no, ¿qué esperas?
Su Majestad Imperial, como nos debemos referir a él, es alguien que puede romper fácilmente el estereotipo de la superestrella intocable. Al subir al escenario lo hace debidamente entacuchado con lentejuelas y lo termina semidesnudo, solo con una trusa roja y bailando sin ningún pudor ante un público extasiado que bien sabe a lo que iba: a mover el cuerpo y terminar empapado de sudor, saliva y cerveza.
Julián Lede dio vida a Silverio por allá de 2002, cuando lanzó “Yepa yepa yepa”, rola que ya es un himno de toda la chavorrucada. A finales de noviembre pasado lanzó la primera parte de su nuevo disco Silverio, cuya continuación conoceremos durante los próximos meses.
Entrevista con Silverio, Su Majestad Imperial
Tu nuevo disco contiene una saga, ¿de qué se trata?
Son dos partes. Con “Fuga” salió la primera, que fue filmada sobre un burro, donde Silverio está en el Limbo. Y la otra mitad, que la verán en 2019, es en un hospital. Se trata como de un infierno bastante absurdo, pero que termina siendo mejor que estar aquí.
¿Cómo pinta el 2019 para Su Majestad Imperial?
Habrá muchísimo más cagadero con este nuevo material. La verdad es que ya queríamos inyectarle nueva sangre al asunto. Es un disco completo, salieron ya siete rolas y la octava sale pronto. Será otro cañonazo y estaremos tocando por todos lados, sacando otro video y filmando, tal vez, uno más. Viene activa la situación.
Tus videos siempre se han caracterizado por sus paisajes particulares, crudos, verdaderos, ¿cómo haces esa selección?
Creo que la realidad rebasa a la ficción. Nada más basta con voltear un poco alrededor para encontrar cosas verdaderamente sorprendentes. En esta ocasión [para “Fuga”] estaba buscando un paisaje más bucólico, más de ensueño, por llamarle de alguna forma. Algo que me caracteriza es estar buscando locaciones que son bastante peculiares. No hace falta inventar mucho, todo está puesto alrededor. Esto es un cagadero, entonces uno no deja de sorprenderse de todas las pendejadas, chingaderas y mamadas que hay alrededor.
¿En qué momento haces tus canciones?
No tengo horario, pero son las horas nalgas. Hay que sentarse ahí en el estudio a rasparle. Eso de la musa y eso son puras mamadas; hay que machetearle. En este disco sí estuve pensando mucho en la audiencia; o sea, lo que buscaba era subirle una raya de velocidad y violencia al show. Es un disco para escucharse en vivo. De hecho, hay una canción llamada “Aborígenes”, dedicada al público que gusta de mi espectáculo. Ese es el ángulo, un material pensado para tocarse en vivo, para que se vuelva más violento.
¿De dónde salen las ideas para tus rolas?
Quiero suponer que salen de todo lo que está alrededor. Supongo que si me fuera a vivir a la playa me saldrían cosas bastante diferentes, por eso no me quiero ir a vivir para allá. Esto está colisionando aquí en la ciudad, en el lugar en que vivimos, así que resulta bastante entretenido ver cómo todo se desmorona a pedazos.
¿A dónde va Silverio de fiesta?
La ciudad está llena de cantinas por todos lados, por ejemplo la Faena, donde se organizaban fiestas. Creo que el centro tiene su atractivo, allá está Garibaldi con el Tenampa, que es una joyita. Todo lo que sea cantinas, así de ese perfil, está muy a gusto. Más que bares prefiero las cantinas, porque uno puede cotorrear muy a gusto y ponerse hasta las chanclas.
¿Qué esperas del público de la CDMX para los próximos toquines?
Que se la rifen más todavía, porque los veo aún muy tímidos. A ver si con estas nuevas rolas se deciden a salir del clóset y así entrarle con gusto y sabor al cagadero. Para eso es este show. Siempre he dicho que la mitad del espectáculo lo hace el público, yo nada más enciendo la mecha. Les hago una cortés invitación, por parte de Su Majestad Imperial, a que se desgañeten, se desfoguen y que entreguen todo lo que tengan, porque lo van a ver pasar enfrente y no se van a dar cuenta. Mi espectáculo no es un show para la gente pasiva que gusta de ver un espectáculo en la comodidad de la butaca y aplaudir cuando se acaba una canción, esto es para entrarle con huevos. Eso es lo que esperamos del público, porque para eso es.
La pregunta que todos queremos hacer en una entrevista con Silverio, ¿dónde compras tus trusas rojas?
En cualquier tianguis. Hay que surtirse para todo el año, para que no falte el billete y el sexo. No olviden usar la trusa roja, no solo el 31 de diciembre, sino todo el año, porque definitivamente funciona y funciona muy bien.