El próximo 30 de octubre, el rapero Ignacio Fornés regresa a nuestro país como parte de su gira Almanauta, por lo cual tuvimos oportunida de conversar con él un poco sobre rap, idioma y cultura en esta entrevista con Nach.
Pionero de la cultura hip hop de habla hispana y un liricista fundamental de la primera ola que raperos españoles, Ignacio Fornés Olmo, mejor conocido como Nach, es alguien con toda la autoridad moral para hablar de esta cultura.
En su haber contempla más de una decena de discos en los cuales reafirma constantemente su estatos como uno de los raperos más importantes de su país, posición que ha sabido extender hacia toda la escena del hip hop en América Latina.
Lo suyo no es gratuito, ya que le ha costado el dar extensas giras por Latinoamérica, durante las cuales ha redescubierto ese vínculo intrínsenco que une a todas las naciones hispanoparlantes y, de alguna manera, las hermana.
O, cuando menos, esa es la impresión que le han dejado. Sobre este diálogo entre hispanoparlantes en clave de rap, esto fue lo que nos dijo en entrevista Nach.
Chilango: Nach es una presencia constante en México. Has venido ya en varias ocasiones y tocado en escenarios grandes y pequeños, siempre manteniendo un compromiso con la escena local, ¿qué sientes en esta nueva visita?
Nach: Primero que nada, me encanta jugar de local en un lugar como México, porque eso significa que ya me aceptaron. Me hace sentir abrazado por vosotros de alguna manera.
Recuerdo que el primer concierto que ofrecí en México fue en Tlatelolco en 2008, y desde el gran recibimiento que me dieron entonces, me hicieron darme cuenta que mi música era algo muy grande aun fuera de España.
Creo que desde entonces se forjó un nexo muy especial, una unión que se ha reafirmado con los años. México es un lugar donde todo, desde los olores, la comida y la gente me hacen sentir en casa. Personalmente agradezco y valoro mucho tener un lugar como México a dónde ir.
CH: Esa relación se replica también con otros artistas de tu país y se crea una relación recíproca entre artistas latinos e ibéricos. Desde tu experiencia, ¿cómo los alimenta a ustedes esta relación?
N: Creo que lo que nos llevamos es, sobre todo, un aprendizaje de cómo los grupos mexicanos perciben el Hip Hop y, al mismo tiempo, creo que por fin comprendemos que nuestra música es global.
Esa fue la primera conclusión que saqué y que, inconscientemente, me ayudó a hacer un rap que ya estaba ahí, pero que no era algo que figuraba en el horizonte de mi barrio entonces. Latinoamérica me dio una perspectiva musical mucho más grande y me ayudó a comprender que esto es un intercambio de esencias entre artistas.
CH: Creo que es diálogo se fortalece porque se resignifica el uso de la lengua y genera una especie de reencuentro con todas las naciones hispanoparlantes, ¿qué opinas de esto?
N: Creo que nos une y nos da una capacidad de entendernos y sentirnos, más allá de las problemáticas históricas entre países. Es raro, porque en España estamos en Europa… pero no nos comunicamos bien con ella, no nos entendemos tanto.
Más bien estamos en un punto extraño: miramos a un continente que está más lejos, pero con quien sí nos entendemos. Creo que a través de la música agarramos un nuevo rumbo, al igual que los artistas latinos que viene acá, hay un flujo entre unos y otros.
En lo referente a Hip Hop, también nos hemos aproximado y nos percatamos que estamos, inclusive, más cerca de lo que creíamos. A nivel cultural tenemos nuestras diferencias, pero sabemos tomar del otro este tipo de cosas para alimentarnos.
Gracias al Hip Hop yo he podido acercarme al mundo de una forma que no te imaginas; de no haber sido por eso, habría estado viajando solo por mi país y, de vez en cuando, hacia Europa entre personas con quienes no tengo tanto que ver.
Es una sensación rara y agradable, que, en resumen, me hace sentir que estoy lejos, pero al mismo tiempo estoy en casa.
CH: Hablando de eso, ¿cómo se refleja este acercamiento, esta relación, específicamente en tu trabajo?
N: Con ese acercamiento la comunicación es mucho más fluida, así que me fue fácil contactar con gente como Residente y entender lo que queríamos hacer. También logramos encontrarnos con El B de Los Aldeanos hasta aterrizar nuestra colaboración.
Hay muchos artistas latinos de nivel; esta vez le tocó a los que ya mencioné, pero tenemos planes para el nuevo disco con más gente. Reitero: este acercamiento cultural permite que estas cosas sucedan.
CH: ¿Será que viene una colaboración con algún rapero mexicano?
N: Respecto a eso, yo creo que lo primero que tengo que hacer es pelearme con Big Metra… no sé cómo vaya a funcionar, pero sé que será una batalla preciosa. Sí, será una pelea hermosa y sería un paso más hacia donde quiero ir.
CH: Hace un par de años incursionaste en la industria editorial, ¿tienes planes para continuar en el mundo literario?
N: Sí, este 16 de noviembre estreno mi segundo libro de poesía, Silencios Vivos. La poesía me está aportando muchísimo, me sirve como terapia, como desahogo y autoconocimiento. Me ayuda a saber quién soy, qué soy, a dónde me dirijo y por eso no quiero dejarla de lado. Esta ha sido otro viaje vertiginoso ver cómo toma forma, pero ya está listo.