Uno de los secretos mejor guardados del arte, al menos hasta hoy, es la identidad del artista conocido internacionalmente como Banksy. Este artista que usa el aerógrafo y el esténcil para dar vida a una obra con matices políticos, hoy parece estar al descubierto. Pero no de manera voluntaria.
Gracias al uso de técnicas de rastreo e identificación criminal y recopilando las coordenadas de 140 lugares donde su obra ha aparecido, los científicos de la Universidad de Queen Mary de Londres han anunciado que al fin lograron revelar la identidad de la incógnita y le han puesto nombre: Robin Gunningham.
Este descubrimiento fue publicado en la revista Journal of Spatial Science. El estudio coincide con uno previo realizado hace ocho años por The Sun of Sunday a partir de una investigación que indagó entre colaboradores y amigos que apuntaban a un hombre conocido como Robin Gunningham, nacido en Bristol hace 42 años. La investigación también lo relaciona con la Cathedral School, donde habría recibido formación académica.
El equipo de científicos que dicen haber descubierto su identidad se basaron en un perfil no sólo de lugares donde la obra de Banksy ha aparecido, sino también de lugares que Robin suele frecuentar, como bares, parques y departamentos.
Aparentemente, uno de los más grandes misterios del arte contemporáneos han quedado al descubierto. Esto podría afectar legalmente a Gunningham, pues parte de la obra de Bansky es considerada “arte de guerrilla”, es decir, en ocasiones aparece en propiedad privada sin permiso de los dueños y hace críticas a sucesos políticos y de actualidad.
¿A ti te late la obra de Banksy?
Además checa:
Manual para hablar sucio durante el sexo
Gatortas: un delicioso ataque Godínez
Por qué Pink es la mejor peli del año