A pesar de que muchas personas señalan que no hay preguntas estúpidas, nadie dijo nada sobe las preguntas irritantes. Todos hemos sido víctimas de ellas. Y es que estas preguntas han sido transmitidas de generación a generación. Algunas sirven para romper el hielo y otras, para sacarnos de quicio.
Sin miedo a irritarnos, hicimos una lista con 23 de las preguntas más irritantes y sus posibles respuestas. Díganos si nos faltó alguna y cómo responderían ustedes.
– ¿Se fue la luz?
Clásica de clásicas. Esta pregunta la plantean en medio de un apagón. ¿Por qué? No se sabe.
Respuesta sugerida: No, me encanta estar a oscuras. En la noche. Sólo. Es mi idea de felicidad.
– ¿Te cortaste el pelo?
Pasaste dos horas pensando tu cambio de look. Sientes que te ves FA-BU-LO-SO y el único comentario que recibes es este.
Respuesta sugerida: Por supuesto que no, me creció la cabeza.
– ¿Me veo gorda?
Todos los hombres sabemos el riesgo de este cuestionamiento. Nunca nadie ha dado una respuesta 100% correcta. Si dices: ‘no, mi amor, siempre te ves hermosa’ piensan que les estás dando el avión. Si decides señalar ‘la verdad sí has subido de peso’ te espera un futuro muy peligroso.
Respuesta sugerida: Finge demencia. No hay respuesta segura.
– ¿Dónde lo perdiste?
Estás enojado. Perdiste un objeto importantísimo para tu vida diaria. Te encargaste de buscar hasta en el escusado.
Respuesta sugerida: ¡Qué bueno que me preguntas! Nunca se me hubiera ocurrido BUSCAR POR TODOS LADOS PORQUE NO TENGO IDEA.
– ¿Tan guapa y soltera?
Esta frase te encasillará en galán de balneario.
Respuesta sugerida: ¿Tan desesperado?
– ¿Qué onda?
Nunca hemos sabido qué contestar a esta pregunta.
Repuesta sugerida: ¿Qué tranza?
– Y… ¿qué cuentas?
Típica frase rompe hielos, pero tetísima.
Respuesta sugerida: Lechugas.
– ¿Estás enojada?
Si lo preguntas a tu mujer, en medio de una discusión, prepárate para más dosis de discusión.
Repuesta sugerida: No, me encanta discutir por todo. Es mi idea de felicidad.
– ¿Le das like a mi foto? Es para un concurso.
Esas personas con las que nunca tienes contacto humano, de pronto deciden pedirte este favor.
Repuesta sugerida: ÑO
– ¿Te pintaste el pelo?
Evidentemente este rosa fosforescente no es natural.
Repuesta sugerida: Por supuesto que no. Se cambia solito de color. Soy un mutante.
– ¿Por qué te tatuaste?
Repuesta sugerida: Psss nomás.
– ¿Te pusieron brackets?
Tener que soportar la boca llena de fierro es casi tan irritante como esta pregunta.
Repuesta sugerida: Sí, qué feo nombre, ¿no?
– ¿Te caíste?
Aparentemente moretón, pantalón rasgado y cara de zombie no son señales suficientes para descifrar el código.
Repuesta sugerida: No, me impresionó el diseño del suelo.
– ¿Te puedo robar un beso?
Esta pregunta te llevará al camino de la temible zona de amigos.
Repuesta sugerida: ¿Quieres ser mi amigo?
– ¿Estudias o trabajas?
Esta pregunta, dicen, funcionaba en 1990.
Repuesta sugerida: Bienvenido al 2013. Hasta nunca.
– ¿Estás llorando?
Las lágrimas que escurren por mi rostro no son alegría, precisamente.
Repuesta sugerida: No. Estoy destilando amor.
– ¿Me pasas la tarea?
Aunque sea la mujer/hombre de tus sueños. La respuesta siempre será un firme ÑO.
Repuesta sugerida: ÑO
– Ola k ase?
Ya, por favor. No insitan.
Repuesta sugerida: Ola k dise, ya pasó de moda o k dise
– ¿Qué haces por acá?
Cuando te encuentras a un amigo en el súper, por ejemplo.
Repuesta sugerida: Vine a pedirte matrimonio.
– ¿Ya a jalar? (EN EL GYM)
Pregunta tetísima, neta. ¿A qué otra cosa vas al gym?
Repuesta sugerida: No. Vine a admirar tu hermoso rostro.
– ¿Cómo te llamas?
Si la pregunta es después del sexo. Algo hiciste muy mal.
Repuesta sugerida: Como tu quieras, beibe.
– ¿Ya entró?
Repuesta sugerida: No, lamentamos informarles que para esta GRAN pregunta no hay una respuesta sugerida. Jamás la habrá.
– ¿A qué hora sales por el pan?
¿Quién eres, Yordi Rosado ligando?
Repuesta sugerida: En 1967.
– ¿Qué tranza?
El mismo caso con el qué onda.
Repuesta sugerida: ¿Qué onda?
– ¿Te puedo preguntar algo?
Repuesta sugerida: Pero por supuesto… que no.