Por una Cuba libre de prejuicio…
Por: Colaborador
Por: Wenceslao Bruciaga
El Centro Histórico de la Ciudad de México es enigmático, bohemio, caótico y seductor. Y su furor al parecer pasa, a veces fuerte, a veces ligera como la malita primavera. Por momentos todos los antros de moda se aglutinan en sus calles y después la diversión se muda a otro lado. Pero al parecer, no pasa lo mismo con los antros gays. La calle de República de Cuba aún alberga tres grandes clásicos de la noche gay que resisten la prueba del tiempo y a los remixes y bien vale la pena revisitarlos de vez en cuando.
1. Cervecería Viena, República de Cuba 3
Sitio con rockola donde los machos de verdad hacen de las suyas. No hace mucho esta legendaria cervecería acaba de ser remodalada con unos coquetos sillones y además, expandieron sus instalaciones para que la testosterona tenga más campo de acción.
2. El Oasis, República de Cuba 2-G
Lugar estrobodélico, lleno de palmeras, sillas de colores folklóricos y harto sombrero norteño. Presenta un delicioso show travesti y de repente sueltan el karaoke para los muchachones con talento.
3. Marrakech, República de Cuba 18
Si bien este colorido salón es relativamente nuevo, es la sensación del momento. Los fines de semana no cabe ni un alfiler en sus instalaciones, proyecta películas icónicas de la cultura pop-gay, y el show stripper, por alguna extraña razón, levanta sudorosos suspiros.
Columnas anteriores:
Me enamoré de ti en un chat
Un puñal en serio
Los discos indispensables del clóset
Notas relacionadas:
¿Papás gays?
Asesino a domicilio