En los turbulentos e inolvidables años noventa, no había nada como irte de pinta, llegar tarde a casa después de la escuela y tomar “prestado” el cambio de las tortillas. Todo esto con un simple objetivo: ir a las “maquinitas” y jugar el juego más “prohibido”, sangriento y satanizado de la época. El que ponía a sudar a las mamás y era la pesadilla de los maestros. Sí, Mortal Kombat.
Veinte años después, Mortal Kombat regresó más violento, realista y perfeccionado que nunca, y aunque ya no tiene el mismo impacto que generó en aquellos años, mantiene la esencia que lo ha hecho destacar del resto de los juegos de pelea: el factor diversión.
Hace 4 años, Mortal Kombat demostró que podía reinventarse y sacudir los cimientos de la industria con un remake que dejó satisfechos tanto a fans como a novatos. Hoy, esta tradición continúa con MKX, que potencializó aún más las características incluidas en el remake pero introdujo otras nuevas para garantizar su estadía en una industria donde el juego en línea domina todos los frentes y los usuarios siempre buscan más por su dinero.
A pesar de que MK es un juego bueno por sí mismo, hay que aceptar que si sigue aquí es por sus fans. Y es justamente para ellos que está hecho gran parte del título, con guiños y situaciones familiares por doquier, empezando por el modo de historia.
En 12 capítulos, cada uno protagonizado por un personaje particular, conocerás qué pasó después de los hechos del remake de 2011 de Mortal Kombat, donde Shinnok ataca el Earthrealm con su armada y Raiden y sus aliados deben defenderlo cueste lo que cueste.
Si eres alguien que, como yo, le da prioridad a las campañas en los juegos, deja te digo que con la de MKX no serás decepcionado. Obviamente, si eres fan de la serie, sabes lo que puedes esperar. Si no, ahí te va: diálogos ridículos, cameos, momentos de tensión y comedia no tan bien lograda. ¿La odiarás por esto? ¡Para nada! La verdad es que es muy divertida e incluso podría decir que tiene una trama interesante que, si bien no ganaría el Oscar si fuera una película, sí te va a entretener. Además, es súper chido ver las relaciones entre padres e hijos, aunque estos últimos no terminen de volverse tan relevantes como sus progenitores. Fuera de ello, espera buen trabajo actoral, buena animación y una que otra secuencia de botones para ponerle “tensión” a la trama.
Y ahora lo que más me gusta de la campaña: que puedes probar con varios personajes para ver cuál te gusta más si es que estás indeciso/a. Además, puedes ver a ciertos elementos que aún no están disponibles, pero podrás desbloquear más adelante.
Hablando del elenco de este juego, debo decir que está bastante bien balanceado. Si no me crees, clávate en las tres variaciones de cada personaje. Y es que en los juegos de pelea suele ser frustrante que prefieres a tal o cual personaje por su personalidad, movimientos o vestuario y resulta que está muy mal balanceado o que es muy lento o lo que sea, y terminas de malas porque tienes desventajas en las peleas y terminas usando otro personaje que no te gusta tanto, pero da más batalla.
En Mortal Kombat X rara vez te encontrarás con este problema porque cada personaje tiene variaciones que se adaptarán a tu estilo de juego, evitan la monotonía y te permiten hacer frente a cada enemigo de formas diferentes.
Punto a favor de los que luchan por derribar los estereotipos de las mujeres en los videojuegos: esta vez el elenco femenino está mucho menos exagerado en sus proporciones, es más realista pero sin perder agilidad o feminidad. ¡Bien!
Otra cosa que me gustó del elenco es que los personajes klásicos (puse k en lugar de c a propósito) conservan sus movimientos característicos pero tampoco son lo mismo de siempre gracias a sus variaciones.
Por supuesto, los fatalities merecen mención aparte porque son más sangrientos y crueles que nunca. Sobre todo, se ven más realistas y brillan (literalmente) por ello. También cuentas con Brutalities que, más allá de ser un recurso estético o impactante, se convierten en un reto para ti pues debes cumplir ciertos requisitos para poder sacarlas y acabar con ellas la batalla. ¿Te acuerdas cuando los fatalities costaban trabajo y tenías que aprendértelos de memoria para presumírselos a tus amiguitos? Pues eso ya se acabó, pero llegaron los Brutalities para cumplir esas funciones.
A la par de los Brutalities, ahora cuentas con una barra de stamina que se va gastando en la batalla. Acciones como correr o romper combos están determinados por ella, así que tienes que pensar muy bien en qué la usarás.
Una vez que terminas la campaña, el tutorial y todo eso que puedes hacer solo, es momento de clavarte en el multiplayer, que no es 100% revolucionario pero cumple cabalmente con su misión de divertirte.
A pesar de algunos problemas de lag a la hora de las batallas en línea, los encuentros son brutales y si de verdad quieres un reto, debes saber que sólo los mejores salen a luchar en línea. Practica, practica, practica, conoce a tu personaje y aviéntate a crear algún cuarto con tus amigos para aprender nuevos combos.
Mortal Kombat es uno de esos juegos que puede quedarse en lo básico para hacerte pasar un rato efímero y ya, o puede convertirse en un enorme reto para los más clavados, pues si bien puedes ganar presionando botones a lo tonto, si realmente quieres sacarle todo el jugo tienes que aprender a detectar lo que estás haciendo, encadenar combos, usar el escenario, etc. Pero no te estreses: la práctica hace al maestro o la maestra.
Además de las batallas uno a uno y sus variaciones, tienes otros modos en línea que vale la pena que cheques. Si te aburres incluso con ellos, Mortal Kombat X no es para ti. En las “faction wars” el objetivo es que tu facción sea la que más puntos tenga al final de cierto tiempo determinado. Todos los jugadores mundiales de MK van acumulando puntos para su fracción, mismos que puedes obtener haciendo lo que sea dentro del juego. Las recompensas son variadas. Si bien este modo no es propiamente espectacular, sí te hace pertenecer a un todo que te hace esforzarte para ganar y obtener más puntos (eso si te interesa, claro).
Mi modo en línea favorito son las “living towers” que son una variación de las torres clásicas que ya conocemos pero aquí son en línea y te imponen diversos desafíos que van cambiando conforme pasa el tiempo. En algunas, el juego te impone condiciones al azar en las batallas, como pelear de cabeza o con velocidad aumentada. Vale la pena para salir de lo mismo de siempre y medirte contra ti mismo.
En resumen: tanto localmente como en línea, los diferentes modos de juego de MKX son divertidos y variados, pero jamás pierdas de vista que este es un juego de peleas, y que por más que los desarrolladores se esfuercen, la repetición y la perfección es parte esencial del mismo.
Para mí, Mortal Kombat es un juego infaltable en mi ludoteca. Jugué el remake de 2011 y me gustó mucho. El X es aún mejor: es muy divertido, tanto se puede tomar en serio como no, sus personajes me encantan, es curioso ver la relación entre padres e hijos, tiene una trama que raya en lo kitch y las batallas en línea o locales son brutales.
+ El mejor Mortal Kombat de la historia
+ Buena trama
+ Muy divertido
+ Variaciones y Brutalities le ponen reto al juego
+ Las “torres vivientes” son entretenidas y dan pie a cosas bastante bizarras y desafiantes.
+ Elenco balanceado
- Los hijos viven a la sombra de sus padres
- Estrategias de monetización un tanto desventajosas
- Ligeros problemas de lag en el juego en línea
Mortal Kombat X
Desarrolla: NetherRealm Studios
Publica: Warner Bros. Interactive Entertainment
Consolas: PS4, PC, XO, Android, iOS
Clasificación: M para audiencias maduras
Fecha de salida: 14 de abril 2015