Director: David Lynch
¿De qué va?
Los sueños de una actriz fracasada se ven interrumpidos al despertar de golpe a una realidad que es una pesadilla.
¿Por qué vale la pena?
Porque Lynch es de los pocos, muy pocos directores que hacen trabajar al espectador. Un creador de sueños y constante inquisidor de lo real y de los mundos simulados que nos rodean.
Frase:
Hey, niña bonita. Es hora de despertar.