No es un escritor cualquiera. Saluda cordial y un poco tímido, con algo de prisa; ya en la plática y, a la hora de leer sus poemas, brota un mosntruo al que da miedo acercarse.
Los poetas debemos salir a la calle, no leer sólo para los escritores.
Tiene claro que "los poetas hemos olvidado la parte del show", que la poesía debe salir a la calle. Por ellos se involucra en proyectos como Poesía en voz alta, donde lee su obra con un altavoz frente a cients de personas o se avienta una antología de poetas que coverean a Juanga. Transita con desenfado de lo culto a lo popular, del entretenimiento a lo exquisito. Pero no sólo es un poeta experimental ni de nicho: este año fue publicado por la ediorial Preextos de España. Y lo más mosnruoso de Fabre (al menos en el contexto de la literatura) es loq ue cree del arte: "No se trata de pureza; el arte debe dialogar con su contexto: yo estoy a favor de la mpureza".