En torno a los Rolling Stones, han surgido un chorro de historias que van de lo exagerado, hasta lo inverosímil o francamente fantasioso; verdades que con paso del tiempo se han convertido en mitos y viceversa; anécdotas que dan de qué hablar, que van y vienen, dando carne y hueso al espíritu de esta banda.
De tal modo, esta vez hemos realizado un recuento de las leyendas urbanas más locochonas que han marcado la biografía y el currículo de Sus Satánicas Majestades, así que piquen la salsa, pues esto se va a poner bueno.
- Una de las leyendas urbanas más sabrosas tiene que ver con nuestra ciudad. En 1998, durante su visita a Chilangolandia, los Stones realizaron una sesión de fotos en el legendario barrio de la Candelaria de los patos, bajo la dirección del fotógrafo mexicano Fernando Aceves. Ahora bien, cuenta la historia que saliendo de la sesión, Charlie Watts propuso ir por unas gordas a la Meche para quitarse el estrés y probar el chicharrón azteca.
- Según los decires más cizañosos, la disputa por el liderato del grupo entre Mick Jagger y Brian Jones terminó en manazos, pellizcos y arañazos. Y lo más impresionante: en plena bronca, Sir Jagger desenvainó un cuchillo cebollero bien filoso para amenazar al guitarrista; después intervino la esposa de éste y todo quedó en el susto.
- La rola “Angie” tiene un origen por demás perturbador. Se rumora en la cuadra de las chismosas que una tarde invernal, la entonces esposa del recién difunto David Bowie, Angela, cachó a su marido desnudo en la cama, acompañado del también encuerado Mick Jagger (en plena vocalización de La Mayor). Para que Angela Bowie no se enmuinara tanto y perdonara a su viejo, Jagger le compuso esta canción que ya es un himno en nuestros días.
- Cuando el Tri de México les abrió los conciertos a Sus Satánicas Majestades acá en tierras chilangas, la jefa de Alex Lora prendió la video para grabar el histórico acontecimiento, pero nunca lo televisaron. Sin embargo, dicen las malas lenguas que el gritante mexicano les obsequió unas playeras de la virgen, y a su vez, los Rolling le regalaron una tanga de cuero (cremallera incluida, al estilo Sticky Fingers) para su domadora Chela, y una trusa con la lengua stoniana (tipo calzón de elefantito con trompa) para él; sin embargo, el buen Alex no la llenó.
- Parece ser que fue el mismo Keith Richards quien difundió el rumor: luego de una noche de atascón en la que ingirió todo lo que tenía a su alcance, al no haber ya nada que meterse, sacó las cenizas de su padre y las inhaló con singular alegría, ¡ah, pero eso sí!, con mucho respeto.
- Quizá sea cierto o tal vez no, pero se cuenta que el sexo diario con jovencitas mantiene en forma a Jagger; el whisky con leche y hielo tres veces al día conserva vivo a Keith, mientras que a Charlie Watts lo congelan cada noche para que no se les vaya a quebrar durante la madrugada. Ustedes dirán: ¿y Ron Wood? Cuando los demás hacen todo esto, él se va a jugar canasta con Rod Stewart.
- En los últimos lustros ha cobrado fuerza la versión de que la cubierta del Their Satanic Majesties Request, en su edición original, contaba con un diseño 3D, con el que se creaba un efecto único: al mover el disco, cambiaban los rostros de cada uno de los músicos, pero lo más sorprendente era ver que la imagen de Brian Jones no cambiaba, simplemente desaparecía como vaticinando su trágico final dos años después. Por ello y debido a los costos de producción, Decca decidió quitar el 3D y dejar sólo una fotografía como portada.
- En su última visita al D.F., los Stones salieron de juerga una noche a un bar de Polanco, donde se encontraba también por casualidad Paulina Rubio, quien sacó a bailar un punchis-punchis al buen Mick, pero éste la despreció. Ante esta situación, la chica dorada se puso de aferrada a querer bailar con él, lo cual desató el enojo de los Rolling y se fueron del lugar.
Ya se habrán dado cuenta, chilangos, de que hay un titipuchal de leyendas urbanas sobre los Stones. ¿Cuáles serán verdad?, ¿cuáles, sólo producto de la imaginación fanática? Comenten y digan qué otras leyendas de los Rolling Stones conocen, pues aquí su palabra es ley.
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Le cae un espectacular y Loret se mancha en la entrevista