¿De qué se trata?
Aunque en los conciertos no son nada baratas, hablamos de líquido frío, de cebada, malta, mmmm cervezaaaaa.
¿Por qué se agradece?
Porque se pueden compartir cuando son dobles.
Porque con chelita en mano, cantas mucho mejor las rolas. Jo.
Gritaste todo el concierto, eres un pequeño clon de Bocaseca Man y de pronto… oh milagro, cerveza helada (y doble). Tómatela rápido porque en los vasos de cartón se calienta en menos de lo que puedes decir: “¡Cerveeeeeeza!”
Posibles escenarios fallidos
Estás prendido, viendo a tu banda, y no falta el típico vendedor de chelas, que grita junto a tí en la parte más introspectiva del concierto. Sape.
Las únicas chelas que hay parecen caldo de camarón. Asegúrate de que la temperatura sea la correcta antes de hacer la transacción.
La mitad de tu chela es espuma. Te costó cincuenta varos.