¿En qué consiste?
Básicamente es vestirse para la fiesta de los colores del semáforo (rojo, amarillo y verde) chicas, chicos y chico-chicas escogerán sus mejores prendas con estos tonos, ¿pero y eso qué tiene de divertido?, bueno pues lo interesante es que el color indica qué tan disponible estás a la hora de la ligada. Rojo significa “no me molestes, soy tan fiel que no engañaría a mi hermoso novio (a) por ti” (¡boring!), Amarillo significa “Soy tan indeciso (a) que puede ser que reparta uno que otro besito por ahí, claro si mis fans lo ameritan aunque también puedo ser muy amigable” (¡boring!), y por último el verde posee la actitud de un puberto en aras de las artes amatorias… “¡Voy a echar mis mejores carnes al asador!” (ahora sí es tu noche). En fin aquí lo bueno es que solito no regresas a casa.
¿Qué necesitas?
Actitud. Ninguna hadita mágica de cualquier cuento infantil te va a proporcionar el outfit ideal, hay que echarle coco a la vestimenta porque no querrás ser el único verde que parezca una triste pera en lugar de un antojable mango madurón.
Tips fiesteros
– No olvides llevar mudas de los dos colores restantes, tu mood puede cambiar radicalmente.
– Recuerda lleva rojo, amarillo y verde, no NARANJAS, no TURQUESAS, NO MAGENTAS o NO AZUL CHICLAMINO (aunque hayas admirado al buen Rodrigo Cabello) o confundirás a tus admiradores, nada de escoger un color que medio se le parezca.
– Pon buena cara. No vales vestirse de verde y traer cara de rojo.
– Es de hecho una opción muy barata y hábil pues puedes matar dos pájaros de un tiro, primero puedes conseguir date y no flaquear nunca más, y segundo puedes organizarte con tus amigos y hacer una especie de Semáforo Fest: Conseguir bandas musicales de confianza, vender bebida, realizar flyers y cobrar cover.¡Así ganas tú y ganamos todos!.