Marcel Rius es el autor de Fanatic Wars, un libro de fotografías que registra la, casi, doble vida que viven los adeptos a Star Wars. Checa lo que nos contó sobre su proyecto y no pierdas de vista las fotos, que dicen más que las palabras.
¿Cómo empezó a tomar forma este proyecto?
Empecé a retratarlos (a los fanáticos) en convenciones. Entonces tampoco había una idea clara de qué haría con ello. El libro fue más documental porque quería que así lo fuera, no quería un libro, por así decirlo, tan artístico; más adelante salió la idea de hacer un paralelismo entre vida real y fantasiosa. Muchos presumen sus trajes y luego ver qué pasaba cuando se lo quitaban, qué cambiaba en esa persona.
¿Es decir que querías documentar algo y después derivó en vertientes estéticas?
Sí, como vestirlo un poco más, y ya que era México y sólo en México, pues hacerlo más local, porque hay unos bootleg que son como muñecos copias de los originales y están muy cagados (y se ven en el libro). Hay algunos objetos muy mexicanos, por esa astucia muy mexicana que puede hacer que un fan pueda hacer un ‘arturito’ con un cubo de basura y una tapa de pastel.
La idea principal era captar ese paralelismo entre realidad y ficción; entre ese personaje que tiene un puesto de director de banco y es una persona normal y va de traje todos los días y luego, pues obviamente tiene esa vida paralela donde los fines de semana se va a sus convenciones o tiene otra fisonomía.
¿Por qué fanáticos de Star Wars y no de otra cosa?
Supongo que por mi afición. Admiro mucho a mi tutor, que era Gerardo Montel Klein en ese momento, y él decía “haz una cosa que te guste, que te llame, que te llene y que te mueve, porque si no los proyectos quedan en el olvido y pasan sin penas ni glorias”. Entonces, como soy fan, fui a la convención de expocoleccionistas a ver qué. Ya entrando poco a poco, como soy fan, quería ver sus colecciones, quería ver sus trajes, quería ver más: qué tenían y qué dejaban de tener, compartir un momento por su interés de fotografiarlo o porque también tenía ganas de ver sus piezas. Como fan me agradaba el tema.
¿Qué buscas con la estética de este proyecto y por qué otro camino te habría gustado que fuera?
El camino es el correcto. Muchos fans me están escribiendo para intentar hacer una segunda parte porque faltaron muchos personajes por tiempo y presupuesto. Me habría gustado hacer más personajes transformados, no documental, sino ver a esos personajes con traje y sin traje, y más colecciones.
A nivel estético creo que cumple mi expectativa porque cambié de iluminación: a mí me gusta usar luz más suave, entonces iluminaba con tres puntos de luz, más luces contrastadas. También me interesaba ese México colorido y me hubiese gustado buscar fondos más mexicanos, a veces entrabas a una casa más neutra que podía ser más de Madrid o Singapur porque era muy aséptica y era complicado. No como tal, pero sí más ‘mexican curious’.
¿Crees que es un homenaje?
Creo que es un reconocimiento, digo, también siempre que es de los fans de México de Star Wars y para ellos. No deja de ser ese reconocimiento de que a ellos los pueden tachar de geeks y son personas normales, he entablado relaciones con ellos y son niños grandes como tú y como yo.
Con ellos aflora como algo más y si el surfista se puede teñir el pelo de blanco y vestir con hawaianas e ir con su tabla de surf a todos lados, una persona no puede ir con el traje al trabajo pero sí presumir lo que le gusta. Te pongo ese ejemplo.
Homenaje no sé si sería la palabra pero sí ese reconocimiento que ellos están sumamente agradecidos de un trabajo bien hecho que se haya hecho en México, acerca de nosotros. Obviamente hay gente a la que le gusta más y a la que le gusta menos. Para mí ha sido un honor y un orgullo haber tomado esas fotos y para ellos es recíproco. Es curioso porque he visto en Factbook que lo llevan a lugares y les piden firmas como si ellos realmente fueran las estrellas.
¿Has pensado exponer este trabajo en una exposición?
La verdad es que no. Se hizo en 2010. Desde la colectiva del seminario de fotografía contemporánea se hicieron unas imágenes en un tamaño bastante considerable. Pero claro que estoy abierto, armar una exposición cuesta bastante dinero, pero me encantaría. Aunque no sé hasta qué punto a veces hay proyectos que son más editoriales: lo que acaba al final es el libro, no sé si expositivamente en pared sea tan rico.
¿Has pensado en hacer una serie de fanáticos de otros ámbitos?
Sí me gustaría, porque cabe mencionar que cuando estaba haciendo este proyecto me documenté y vi un fotógrafo francés que ya tenía un proyecto de Star Wars y hacía la foto de una maqueta de una nave o de un personaje y luego hacía una foto de un paisaje y analogías de la película entre paisajes galácticos. Hacía un montaje de la maqueta del Halcón Milenario en la Zona Zero.
Pero luego me encontré un inglés que tenía fotos de fans de Star Wars, de Star Trek, y hay como un colectivo de fans de westerns y él tiene una serie de varios fans. Y a mí eso me frenó un poco.
Tú tienes una galeria en Oaxaca y otros proyectos más urbanos de fotografía, ¿por qué declinarte por esto?
Un poco cambiar. Hacía muchos paisajes, lugares, espacios, gente. En la web, a principios de año, empecé un proyecto de exiliados en México de la Guerra Civil Española y que ya quedan bien poquitos. Siempre te vas cambiando y reinventando. A mí como catalán, la idea de conocer a españoles exiliados en México también me atraía mucho. Es como buscar proyectos que te gusten y te llamen la atención y obviamente que no estén hechos.
¿En qué estás trabajando ahora?
He empezado a retratar interiores de coches fúnebres iluminados por dentro y vistos desde atrás. Con la puerta abierta y muy bien iluminado ves que es un coche, pero la idea es hacerlo más sutil, que los interiores de ataúdes no sepas que es un interior. Es decir, tratar la muerte de otra manera, aunque esté tratada de mil aspectos.
¿Qué experiencia te dejó que el libro esté circulando?
La verdad es una gran noticia para mí. Yo esperaba el libro y vino con retraso (yo hice el proyecto en 2010, 2009, pues se atrasó bastante). Se tardó mucho, tenía muchas ansias. Lo que no me agradó es que se tardase tanto, pero es como mi bebé, acabo de tener un hijo.
Además, platicamos con la 501st Legion Mexican Garrison para saber cómo es la vida de las tropas imperiales chilangas a un año del tan esperado Episode VII. ¿Realmente crees saber lo que hay detrás de la fuerza? No tienes ni idea. Dale clic a “SIGUIENTE” (el botón está después de la galaría) para leer esta otra entrevista.