Los chilangos sabemos que la tortilla no solo es esa pieza de maíz redonda con la que puedes hacerte tu taco ¡no señor! Bien agarrada, la tortilla puede ser cucharita, plato, barquillo y hasta servilleta. Nos pusimos a investigar un poco y hay cosas que al resto del país les resultan increíbles (¿hacerte un taco de arroz? ¿un taco de sopa de fideo seco? ¿pues qué nos pasa a los Chilangos?). Hay quien se hace tacos de plátano y en muchas familias le echan mantequilla o hasta nata, pero eso ya es una excentricidad.
Tras una ardua investigación, encontramos diez diferentes formas muy chilangas de agarrar la tortilla, aunque sabemos que no son las únicas. Dinos cuál es tu forma favorita y si sabes de otra, cuéntanos en los comentarios ¡Haz patria y cómete una tortilla!
1.- El rollito
El rollito (El Memo)
Extiéndase la tortilla en la palma de la mano y con la otra -en un solo movimiento- hágala un rollo tan apretadito que pueda servir para empujar la comida de un lado al otro. La tradición obliga echarle sal antes de darle el apretón ¡ay mamá!
2.- El triangulito
Triangulito (El Memo)
Rómpase la tortilla en cuatro pedazos, formando triangulitos, que posteriormente se usarán para llenarse del guisado. Las abuelas dirían “agárrala de cucharita, mi’jo”.
3.- El atascón
El atascón
¿No hay cuchara para servirte el guisado? No se preocupe señor don Tragón: tome la tortilla con la palma completa y póngala sobre el plato. Atásquese con confianza y después deguste. Hay que lavarse la manopla primero ¿eh?
4.- El tradicional taco
Taco
Ponga el guisado adentro de la tortilla. Siga comiendo el guisado directo del plato, y dé mordidas ocasionales al taco. Repita hasta que se acaben las tortillas o la guarnición, y luego pida más.
5.- El cucurucho
Cucurucho
Con media tortilla haga un cucurucho y rellénelo del guiso. Corónelo con un pedazo de aguacate y agregue sal. Abra la boca hasta que truene su mandíbula y empuje. Esto es más parecido a comerse un helado de vainilla, pero lo puede hacer de chicharrón en salsa verde ¿ah verdad?
6.- La servilleta
Servilleta
¿No hay nada con qué limpiarse la trompa después de comer? Faltaba más: agarre su pedazo de tortilla y retire los sobrantes de las comisuras de la boca. Luego, cómase el pedazo, ni modo de desperdiciar. Más efectivo que el papel de estraza.
7.- El remolque
Remolque
A falta de cuchillo o cuchara, no sea maleducado y aviente el arroz al tenedor con el dedo ¡no no no! Para eso se hace una pedacería de tortilla y se va empujando el guisadito ¡más higiénico imposible!
8.- El plato
Plato
¿Llegó tarde a una fiesta y ya no encontró plato deshechable? Póngase una tortilla en la mano (no importa que esté fría) y pida que le echen ahí su costillita de puerco, su arrocito o un chilito relleno. Ahora que tampoco exagere y espere que le pongan ahí la sopa de lentejas, esa mejor cómasela directa de la cazuela (¿pos pa’ qué no tienen platos?).
9.- El arrancagrasa
El arrancagrasa
¿Quedó salsa en el plato? Ni modo de que se quede: tome su pedazo de tortilla y pásela en un ritmo cadencioso como si se tratara de un limpiaparabrisas. Limpie, coma, limpie, coma, hasta que el plato quede limpio ¡tan efectivo como usar fibra!
10.- Los chilaquiles
Chilaquiles
El clásico de las reuniones familiares es tomar una tortilla, partirla y después dejar ese pedazo adentro de la servilleta para que no se enfríe. La tela se va llenando de los cachos de todos hasta que la mamá pone orden gritando “¡Hey! ¡No dejen su pedacerío! ¡agarre cada quien el suyo!” ¡Pos es que se hacen tiesas mamá!
¿Tú cuál aplicas?
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