La tecnología ha vuelto a poner a la fotografía en el ojo de todos, los filtros que vienen integrados en los móviles inteligentes hacen que cualquiera nos sintamos uno de ellos, expertos en imágenes. Sin embargo, hacer foto no sólo consiste en dar clic en el disparador.
Si te interesa “pintar con luz”, te recomendamos seguirle la pista al trabajo gráfico de estos 14 maestros de la lente (paisajistas, retratistas, ensayistas gráficos y fotorreporteros) que congelaron el instante irrepetible de los habitantes y los horizontes del país.
Pedro Valtierra
Fotorreportero especialista en capturar momentos de la historia moderna de México y otros países en conflicto, su sensibilidad y sentido periodístico le han ayudado a atestiguar la realidad, expresarla y tener un punto de vista político y social a través de la lente. Siempre atento, camina mientras mira a la gente con la intención de encontrar un buen motivo para encuadrarlo con su cámara.
Nacho López
Con mirada decisiva atrapó la espontaneidad del hecho callejero, modificó la fotografía documental a través del “fotoensayo” (secuencias donde el instante preciso no se caza, sino que se induce mediante intervenciones planeadas y organizadas por el fotógrafo). En su gráfica aislada se advierte el perfecto equilibrio entre la forma y el contenido, en el que también expresa las injusticias de su tiempo.
Elsa Medina
Coleccionista de instantes, atmosferas y estados de ánimo, logró atrapar sentimientos en la cotidianidad del día a día. Medina se ha desarrollado fotoperiodista de la vida política y social de México, siempre en busca el detalle que escapa al ojo común.
Manuel Álvarez Bravo
Construyó una visión antipintoresca e histórica de la mexicanidad en la época posrevolucionaria, con el rechazo a la caricaturización y el folclor de la identidad nacional. Con su trabajo buscó la redención de la gente común y corriente y de su subsistencia cotidiana. Su calidad vanguardista lo hizo un referente de la modernidad de la fotografía mexicana, incluso André Breton encontraba elementos surrealistas en su obra. Fue impulsor e inspiración de fotógrafos en los años 30.
Enrique Metinides
A bordo de una ambulancia de la Cruz Roja, este fotorreportero de la fuente policiaca (en el periódico La Prensa) capturó la tragedia, el drama y el horror de los accidentes y la muerte en la Ciudad de México. Con gusto exquisito, humanizó la nota roja, se alejó de lo grotesco y burdo de la exposición de la sangre para realizar una composición narrativa gráfica a partir del dolor. Además es el creador de las claves con las que se comunica ahora la Cruz Roja. Su trabajo documental consta de un archivo de más de 14 mil negativos.
Graciela Iturbide
Su fotografía se centra en la sencillez, retrata la vida de las personas, así como del ritmo y calidez de su gente y tradiciones. Graciela consiguió atrapar la esencia y espíritu del pueblo mexicano, realidades y contrastes, así como la eternización del instante natural.
Pedro Meyer
Nacido en España y naturalizado mexicano a los siete años, contribuyó al impulso y crecimiento del fotoperiodismo en México, así como al respeto por la fotografía documental y periodística. Fue unos de los primeros fotógrafos en impulsar el uso de las tecnologías digitales en el país, se le conoció durante un tiempo como “el hereje de la fotografía”, porque renunció a la cámara análoga y optó por la imagen digital. El archivo de Pedro Meyer está conformado por más de 350 mil imágenes, entre ellas fotografías análogas y digitales.
Juan Rulfo
El autor de El llano en llamas y Pedro Páramo trasladó su literatura a la imagen y distinguirse del disparador de instantáneas. Retrato a la Ciudad de México y también el campo, entre los contenidos y estilos de su fotografía están la arquitectura social y los restos arqueológicos, la vida y trabajo en los pueblos, la naturaleza, en especial la vegetación, así como el México profundo, en ellas se pueden apreciar algunas secuencias y rutas donde Rulfo estudiaba la anatomía a los posibles personajes de sus narraciones.
Lola Álvarez Bravo
Con su lente y gran ojo atrapó una época de México, es una de las fotógrafas que mayor relevancia que ha tenido México. Su obra estuvo influenciada por su esposo Manuel Álvarez Bravo quien le enseñó fotografía. Fue una cronista de la vida social y cultural, además de ser pionera en el uso del fotomontaje.
Lázaro Blanco
Talento, originalidad y habilidad en la producción de una imagen fotográfica caracterizan su trabajo, en el buscó retratar los sentimientos latentes o escondidos sobre el mundo. La simplicidad se vuelve elegante en la obra de Lázaro Blanco. Su universo gráfico se compone escenas extraídas de la cotidianidad y de fragmentos tangibles de la propia existencia, ilusiones y sueños.
Gabriel Figueroa
Con su trabajo como cinefotógrafo ayudó a definir la mexicanidad después de la Revolución Mexicana, ilustró a la patria, estableció ciertos tópicos identificatorios de lo mexicano y los llevó a la pantalla grande en más de 200 películas, además de influyó en otros cineastas Emilio “El indio” Fernández. Retomó y trasladó los paisajes a su obra, como lo hicieran los muralistas Diego Rivera, David Alfaro Siqueiros y José Clemente Orozco. Su trabajo como stillman consistía en robar a la fotografía de la misma película los momentos más aptos para el uso propagandístico o comercial de algunas escenas.
Héctor García
La personalidad inquieta hizo que desde joven fuera un habitante de la calle y pata de perro, Carlos Monsiváis lo apodó “el fotógrafo de la ciudad”, su obra da testimonio del desarrollo y crecimiento de la urbe capitalina, es también un reflejo de la vida cotidiana. Este artista de la lente decía que la fotografía era una forma de “escribir con luz” y que atrapó con sensibilidad, belleza y emoción la vida que lo rodea.
Armando Salas Portugal
Con gran sentido de la contemplación, atrapó los paisajes, la arquitectura y los personajes de México, fue uno de los actores principales en la construcción visual de la modernidad arquitectónica en México, registró la construcción de Ciudad Universitaria, el fraccionamiento Jardines del Pedregal proyectado por el arquitecto Luis Barragán, el Conjunto Urbano Nonualco-Tlatelolco diseñado por Mario Pani, entre otros. Convirtió edificios en imágenes comunicables.
Aníbal Angulo
Recrea el mundo, lo vuelve a inventar, mediante la constante invención del cuerpo de la mujer, su obra muestra el cuerpo de una mujer después de mil transformaciones. En su obra convergen la técnica digital y la convencional. En un referente en la fotografía erótica y la manipulación/transformación de la imagen digital.