El bajón y el delirio es una serie de historias escritas por Daniel Hernández, periodista estadounidense de ascendencia mexicana.
El libro está dividido en cuatro partes: Asimilación, Tensión, Riesgo y Mutación. En cada una, el autor nos relata sus experiencias con los distintos personajes de la Ciudad de México. En la primera parte, por ejemplo, cuenta su visita a la Basílica de Guadalupe un 12 de diciembre, aventura que acaba pasando con unos peregrinos provenientes de la carretera de Cuernavaca. En Tensión, nos sorprende con una muy completa investigación del movimiento anti-emo, para la que no sólo entrevistó a emos de la glorieta de Insrugentes: se fue también a Querétaro, donde ocurrieron por primera vez ataques masivos a la famosa subcultura. En esta misma parte, nos transporta también hacia la Condesa, con los trendsetters y fashionistas chilangos. En el tercer apartado, Riesgo, nos cuenta de sus salidas con Quetzal (Q.E.P.D.), diseñador de Marvin y Quetzal, con quien entabló una gran amistad, y de paso nos lleva por Tepito y con la comunidad punk. Finalmente llega Mutación, donde entre otras cosas, nos presenta a los grafiteros y hip-hoperos, de esos a los que muchos temerían por su aspecto.
El encanto de este libro no radica en el hecho de que su autor sea extranjero, pues escritores muy importantes como Jack Kerouac y Aldous Huxley también han escrito sus percepciones de México, ni en el hecho de que hable de la ciudad, porque historias del DF hay miles. Lo cautivador de esta obra radica en la forma en que Daniel aborda sus crónicas: más que ofrecernos un retrato de la ciudad, nos pone frente a frente con la gente que la habita. Nos presenta una perspectiva muy personal, al mismo tiempo que demuestra sus habilidades periodísticas para contextualizar a sus personajes chilangos, muy distintos entre sí. El bajón y el delirio nos ofrece un intresante acercamiento a la gente que vemos día a día, que muchas veces pasa desapercibida. Constituye una excelente evidencia de la gran diversidad cultural mexicana.
Aunque no podríamos considerarlo una lectura obligada, es una muy buena opción para pasar un rato ameno, conociendo a los diferentes tipos de personas que habitan la ciudad.
“El bajón y el delirio”, Daniel Hernández. Editorial Océano, $235
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