Crítica: Black Oil Paintings de Sandra Valenzuela
Por: Fernando Delmar Huerta
Sandra Valenzuela lo toma como base de su más reciente exposición, Black Oil Paintings.
A pesar de que el título de la muestra es ridículamente pretencioso por su uso del inglés (claro, en un mercado marcado por lo ridículamente pretencioso a veces), el contenido de la muestra lo resuelve. Trata, básicamente, de pequeños lienzos repartidos de negro con los logotipos de las compañías petroleras más importantes del mundo camuflajeados en la oscuridad.
Puede sonar una obviedad: el negro de las compañías, cromáticas del mal, es igual de denso y opaco que el producto que manufacturan. Pero la obviedad a veces raya en claridad, y un juego tan bien definido al menos intriga.
Porque el negro también tiene importantes referencias en el mundo del arte. Fue el lenguaje de mucho del expresionismo abstracto norteamericano, del tacherismo francés, de Goya y de Velázquez. Además, Black Oil Paintings toca los terrenos del Pop más explícito, es pintura, a final de cuentas, y la pintura ha perdido algo de lugar en los albores del arte contemporáneo.
No es, entonces, una revelación creativa. Pero encontramos razones que le salvan.
Black Oil Paintings de Sandra Valenzuela se exhibe en EDS Galería, Atlixco 32, Col. Condesa, del 17 de ferbrero al 2 de abril. edsgaleria.com