Si te suena la frase “Hollywood, La Raza y varios más”, seguro visitaste alguno de estos cines que hoy ya no existen.

Los chilangos son amantes del séptimo arte; de hecho, es una de las ciudades con mayor número de pantallas en el mundo, por lo que las salas de cine del DF son parte importante de la cultura local.

Desde salas dedicadas exclusivamente a exhibir películas de Disney, hasta lujosos y enormes cines que después fueron divididos en partes para colocarle más pantallas, estos son algunos lugares que ya forman parte de la historia de la Ciudad de México.

Lindavista

Los chavitos que vivían al norte a finales de los 70 y principios de los 80, seguramente recordarán haber visto en este cine algún clásico como “El Libro de la Selva”, “Bambi” o “Dumbo”, ya que era exclusivo para películas de Disney.

Se localizaba en Montevideo e Insurgentes, y algunos vecinos aseguran que el mismísimo Mario Moreno “Cantinflas” acudió a inaugurarlo por ahí de la década de los 40.

Con un castillo en la fachada, similar a la que se encuentra en Disneyland, este cine también exhibió estrenos como “El Abismo Negro” o “El Gato que Vino del Espacio”, que también eran producciones del imperio de Mickey Mouse.

Pertenecía a una cadena que también era propietaria del cine Continental (todavía puede verse en Avenida Coyoacán y Xola), con el que compartía el slogan “La Casa de Disney” y que, al igual que en el Lindavista, sus paredes estaban decoradas con personajes como Alicia, Donald y Cenicienta.

Hoy, el cine Lindavista es una construcción derruida en cuyo terreno se planea construir, desde hace más de una década, un santuario dedicado a San Juan Diego; es más, el mismo Juan Pablo II, durante su última visita a México, le dio la bendición al lugar.

Cine Latino

Uno de los cines más importantes, grandes y céntricos de la Ciudad de México fue el Latino, que se localizaba en Paseo de la Reforma, justo donde empieza la Zona Rosa.

Con dos pisos, en una sola sala tenía capacidad para unas 2 mil personas, y fue uno de los primeros al que se le instalaron, a finales de los 80, decenas de bocinas para proporcionar una mejor experiencia de sonido al ver filmes como la primera entrega de “Batman” dirigida por Tim Burton.

También solía ser sede de estrenos de películas mexicanas, como “Lola la Trailera”, estelarizada por Rosa Gloria Chagoyán, y para el cual se organizó un desfile de tráileres sobre Paseo de la Reforma.

Hoy, en ese lugar se construye la Torre Reforma Latino, un edificio que tendrá 50 pisos y que será utilizado como habitación, hotel y zona comercial.

El paseo de la Reforma era un polo importante de cines, conformado por salas como el Real Cinema, Chapultepec, Paris y el Diana.

Apolo Satélite

Hablando de cines grandes, los satelucos no podían dejar de tener el suyo, el cual se encontraba a espaldas de Plaza Satélite.

No era precisamente bonito, pero sí con grandes espacios, una buena dulcería y con los últimos estrenos, por lo que a veces convenía hacer el viaje hasta esas tierras para ver películas como “King Kong” (la versión setentera en la que escalaba las Torres Gemelas) o “Furia de Titanes”.

Duró tantos años y tuvo tantas remodelaciones, que muchos todavía alcanzaron a ver ahí películas como “Jurasic Park” o “La Sirenita”.

Esa zona también era un eje importante de cines, ya que ahí se encontraba el Satélite 70 (dentro de Plaza Satélite, en el área donde hoy está la comida rápida), los cines Plaza Satélite (también dentro de Plaza) y los Cinemas 2001 y 2002 (en el estacionamiento de Plaza) cuyos nombres daban una imagen futurista y ultramoderna… así se pensaba en los 80 que sería el siglo 21.

Hoy, donde antes se encontraba el cine Apolo, existe una enorme tienda de artículos de oficina y papelería.

El Dorado 70

El primer centro comercial de la Ciudad de México fue Plaza Universidad y, por supuesto, semejante modernidad debía contar con un gran cine.

Diseñado por Juan Sordo Madaleno, el mismo arquitecto que diseñó Plaza Satélite, este cine tenía grandes novedades, como una enorme pantalla, cómodos accesos y una gran área de dulcería.

Su nombre se debe al año de su inauguración (1970) y que hacía cierta referencia al primer Mundial de futbol que se realizó en el país, el de México 70.

Era de los cines preferidos de los chilangos más fresas y sobrevivió hasta finales del siglo 20, por lo que ahí se pudieron ver filmes como “El Rey León”, “Karate Kid”, “Volver al Futuro” y “El Silencio de los Inocentes”.

Hoy, esa zona está ocupada por una tiendas de discos, computadoras y ropa, además de un casino.

Metropólitan

Este céntrico lugar en el que hoy pueden presenciarse grandes conciertos y es uno de los foros favoritos de bandas como Café Tacvba, en otros tiempos fue teatro y, posteriormente, un enorme cine de gran pantalla y un audio espectacular, al menos para inicios de los 90.

Inaugurado a inicios de los años 40, su arquitectura Art Decó, que todavía conserva, le daba un toque interesante y que lo asemejaba a lugares similares localizados en ciudades como Nueva York. Otro cine de ese estilo en la Ciudad de México era el Ópera, por el rumbo de San Cosme.

Fue remodelado varias veces, por lo que tuvo una vida útil importante, así que en su pantalla se pudieron ver películas como “Taxi Driver”, “¿Quién Engañó a Roger Rabbit?” o “La Guerra de las Galaxias”.

Y tú, ¿qué película viste en estos cines?

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