No importa que tan famosa y concurrida que sea una colonia, siempre guardan secretos que sólo se saben a voces. C.O.M.E. es uno de los tesoros de la Roma, un comedor japonés con corazón de fonda.
Existe un lugar muy original, bien resguardado y sobre todo delicioso para vivir la cotidianidad japonesa. Quienes lo conocen son los godínez y demás trabajadores de la zona, ya saben, los que buscan lugares para saciar el apetito sin sangrar la cartera. Uno que otro vecino y transeúnte despistado también llegan aquí. Así se ha esparcido el rumor de Comedor Original Muy Enternacional, mejor conocido como C.O.M.E., una fondita con mucha onda que lleva más de 6 años cocinando comida que sabe a casa.
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C.O.M.E., comida corrida con sabor japonés
Por lo general cuando los chilangos pensamos en comida japonesa lo primero que viene a la mente es el sushi, el ramen o quizás los espectaculares teppanyaki donde los ingredientes salen volando. Pero, ¿así es la comida cotidiana en Japón? Quizás para algunos, pero en las casas lo que abunda son preparaciones similares a los guisos o guisados que se acompañan de sopa, arroz o una ensaladita —para sentirse más saludable—.
Estos son los platillos del menú del día en C.O.M.E., el cual por $135 pesos ofrece: una deliciosa sopa miso, un bowl de arroz —perfectamente hecho, lo teníamos que resaltar—, ensalada, un plato fuerte con guarnición, té del día y cuadritos de fruta como postre.
¡Tremenda ganga! Y como debe de ser, el precio no está peleado con el sabor, porque aquí la sazón y calidad son garantía. Va calado, va garantizado.
Debido al estilo de comida corrida lo hemos llamado arbitrariamente una “fonda japonesa” ya que nos recuerda muchísimo a nuestras queridas fondas, soporte de la clase trabajadora. Sin embargo, no hemos confirmado que esta haya sido la inspiración del chef, cabeza y dueño de este comedor, porque es bastante reservado.
La fusión México-japonesa, tan íntima, que ocurre en este comedor es lo que lo hace tan especial, también por lo que sus comensales regresamos una y otra vez aunque pasen los años. Aquí siempre te sorprenden con los clásicos perfectamente ejecutados o con las creaciones que surgen a partir de los ingredientes que el chef encuentra en los mercados de abasto de la ciudad.
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Platillos únicos y cotidianos en esta fonda japonesa
Como te contamos, los platillos tienen el sello japonés. La entrada es una deliciosa sopa miso acompañada de verduras como chayote, col china y algas. Después está el clásico bowl de arroz gohan, o sea, arroz al vapor con un sabor ligeramente dulce y sus granitos perfectamente separados. ¡Nada de arroz batido!
Para el plato fuerte siempre hay una opción de pescado, como filetitos de sierra fritos o calamares en alguna salsa; y guisados con pollo, res o cerdo. El pollo kar ague, pollo frito japonés, es uno de nuestros favoritos. Pero los salteados con salsa miso y verduras también están en el top de nuestro corazón.
Las guarniciones varían, pero siempre son verduras, el bowl de ensalada tampoco puede faltar para tener una comida completa.
Además de esto hay refill de té frío —el de cebada es nuestro favorito— y fruta para cerrar el apetito, pero te recomendamos echarte un clavado a la carta y pedir un delicioso mochi, helado de ajonjolí o mango cubierto por una delgada capa de arroz glutinoso. ¡O el pastel de matcha! Un esponjoso bizcocho acompañado de una bolita de helado. 10 de 10.
¿Nos lanzamos a esta fonda japonesa o le temes al éxito? Este secreto y acogedor lugar te espera para comer sin pretensiones platillos hogareños nipones.
Sigue la conversación en @c.o.m.e_c.o.m.e; aquí publican su menú del día.
Cuándo: Lunes a sábado de 12 a 18 h
Dónde: Coahuila #141, colonia Roma Sur
Costo: Comida corrida $135 pesos, pero también tienen platillos a la carta
