Por Georgina Hernández (@Gynna_H)
Dos cuadras antes ya se alcanza a percibir el olor a comida cocinándose en carbón. Al llegar a la esquina de Rosas Moreno y Antonio Caso ubicas el lugar que provoca gruñidos en el estómago: un puesto nocturno de hamburguesas y hot dogs.
El tamaño de ambos es normal, prácticamente el pan que utilizan es el de la marca del osito. La carne de la hamburguesa es de res; sin embargo, no esperes que esté preparada de manera casera. Es carne congelada que venden en paquete en los supermercados, no es gruesa, pero la preparación en la parrilla hace que su sabor sea rescatable.
La especialidad es la Hawaiana y tienes la opción de pedirla con salsa b.b.q., tocino o salchicha. Si es con tocino, dile al hamburguesero que sólo dorado no quemado. Las papas a la francesa también son de paquete. Las fríen durante un par de minutos y en este caso sí las sirven en el punto exacto de un doradito perfecto.
Cabe destacar que también venden costras y alitas de pollo.