Su especialidad son las pizzas al horno de leña, de tamaño ideal para compartir. La casa ofrece las clásicas de tres quesos, margherita o vegetariana y pone a disposición una variedad de ingredientes para que la armes al gusto.
Para una comida en forma hay entradas como el carpaccio debresaola con arúgula o un salteado de verduras al grill. En los platos fuertes tampoco hay grandes sorpresas, con platos abundantes como el fusilli con salsa de vodka y salmón o los ravioles pomodoro, con queso ricotta y perejil. Vale la pena reservar un espacio para el postre: sea un tiramisú o un volcán Vesubio, de chocolate amargo.
La carta de vinos privilegia los tintos afrutados, con interesantes opciones al copeo como el Casa Madero Shiraz o el Trumpeter Malbec.