El 11 de julio de 2013 fue un día gris para los coapenses de diente afilado: Las Muertortas, un puesto banquetero con más de 30 años de tradición, fue removido como parte de un operativo por parte de la delegación Tlalpan.
Las reacciones no se hicieron esperar: el tema se volvió Trending Topic en Twitter y en Facebook fue lanzada la página “Salvemos a las Muertortas”.
¿Qué tenían de especiales estas tortas para que los lugares les agarraran tanto cariño? Primero, sus colosales dimensiones. Una muertorta de tres ingredientes era más que suficiente para quitarle el hambre hasta al más osado. Segundo, su precio: rondaban los 50 pesos, que para el tamaño de esos monstruos, la verdad es que representaban una excelente opción para la golpeada economía chilanga.
Sin embargo, como si de un fénix envuelto en telera se tratase, las Muertortas regresaron, para beneplácito de los lugareños que han encontrado en este puestecito banquetero un verdadero oasis para los más tragones.
Más que un lugar para comer, este local se ha convertido en un elemento de identidad que los coapenses han adoptado como propio: tan es así que fueron los mismos lugareños los que las bautizaron. «El nombre lo crearon unos chavos de la prepa», nos dice Fernando Calderón, uno de los trabajadores de la tortería. «Les pusieron así por lo grandotas, porque con una sola te matan toda el hambre».
A decir de Fernando, es muy raro aquél el que llega a acabarse una completa. «La mayoría la pide para llevar, aunque cuando ya vienen con sus copas encima o de plano con mucha hambre sí se las terminan. Es más, tenemos un cliente que se acaba dos tortas cubanas completas, pero es el único. La mayoría de la gente se siente muy salsa, llegan, la ven y dicen que sí se las van a acabar y muchas veces no se acaban ni la mitad».
Jair Luna, un cliente que está dando la batalla por terminarse uno de estos colosos, nos los confirma. «Esta ya me la estoy acabando más por orgullo que por hambre», exclama casi jadeante. «Pero no importa, como toda la vida he hecho deporte, me doy el lujo de comer cosas así», nos dice, como justificándose mientras le hinca el diente a su torta española.
Nos dice que son ahorradoras:«Con una de estas haces dos comidas completas y no te da hambre hasta el otro día».
A pesar de que ya tienen tres años en este sitio, les ha pegado el cambio de lugar. «Duramos 35 años del otro lado de Acoxpa, yendo hacia Periférico. Desde hace tres estamos acá; seguimos en Acoxpa, pero ahora en el sentido de los coches que van para Miramontes. Mucha gente se quedó con la idea de que nos clausuraron, por eso ya no vienen. Nos gustaría que supieran aquí estamos, que somos los mismos y que pueden seguir disfrutando del mismo sabor y a los mismos precios».
Así que ya sabes, si andas por el rumbo de Coapa y te sientes muy sácale punta, no está de más que te des una vuelta por estas tortas que, dicho sea de paso, están abiertas las 24 horas horas y son una buena opción cuando vas saliendo con hambre de la fiesta.
¡Las Muertortas no estaban muertas, están más vivas que nunca!
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