Si alguna vez has visto el capítulo de South Park donde hablan de pollo frito, sabrás que puede ser tan adictivo como una droga. Sino, basta con una mordida del sándwich de Corazón de Pollo para comprobarlo. Es jugoso, crujiente, picosito y la chupada de dedos es inevitable.
El pollo se marina en salmuera, se empaniza, se baña en adobo y la magia ocurre al sumergirse en la freidora -tsss-. Dos pachoncitos bollos, provenientes de Sal y Dulce Artesanos, son aderezados con mayonesa de Sriracha, pepinillos, mix de coles y MÁS adobo picante. ¿Suena bien? ¡Sabe mejor!
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Debemos advertirte que no hay forma correcta de entrarle al sándwich, así que olvídate de los modales. Y en caso de que tu gastritis esté haciendo de la suyas, no te preocupes, puedes ordenar el pollo natural, pero el picante es la recomendación. También hay uno MUY picante y es digno contendiente de un capítulo de Jackass ¿Todavía existe esa serie?
Aunque el sándwich viene acompañado de papas fritas, tienen una guarnición de mac&beans que vale la pena probar. Algo así como coditos con frijoles bayos y queso cheddar, porque #houseofcarbs. Para bajar la comida puedes ordenar agua mineral o refresco, pero una chela fría es un co co co combo breaker.
También hay pollo rostizado en versión tacos y tortas. Esta última trae chips y un gravy de pollo para sumergir el entre panes al estilo french dip. Ya que si lo tuyo es ordenar un pollo completo, no hay problema, puedes hacerlo.
Corazón de Pollo reloaded
La rosticería abrió sus puertas en 2016 dentro del corredor gastronómico Mesa Nápoles, pero cesó actividades hace casi un año. Por fortuna, los experimentados chefs Luis Serdio y Bernardo Bukantz le hicieron honor al nombre del lugar y decidieron reabrir en una peculiar locación de la colonia Roma.
Al llegar a la esquina formada por Medellín y Zacatecas verás un autolavado, ahí se ubica el nuevo Corazón de Pollo. No es necesario ir a lavar tu coche para poder disfrutar alguna de sus delicias avícolas, pero tampoco es mala idea. Especialmente por eso de la estacionada en la zona.
“Cuando vas a una rosticería, tienen como 200 pollos, pero no sabes si llevan dos o tres días. Nosotros cuidamos que cada pollo que salga sea del día, que esté jugoso y con buen sabor”, nos cuenta Bernardo Bukantz mientras le damos una mordida al sándwich. Así que espera ingredientes frescos y técnicas dignas de chefs formados en el restaurante Biko. Local considerado como uno de los mejores de Latinoamérica, según la lista de 50 Best Latin American Restaurants.
Además, Serdio y Bukantz también están detrás de lugares como Salón Ríos, Lonches Bravo y el food Truck Primario. Y ya para no dejar, Bernardo formó parte del elenco de la última temporada de Top Chef. Así que algo han de saber de cocina.
Y mientras tanto en Corazón de Pollo
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Dónde: Zacatecas 236, Roma
Cuándo: mar-dom 12-20 h
Costo: $100