El chef Luis Ferrer pensó en The Roost como una forma de romper con la dinámica de las rosticerías convencionales. No solo el pollo se rostiza. Los rostizados no tienen porqué ser grasosos. Las rosticerías pueden ser algo más que un puesto sin asientos afuera de la panadería o un local informal donde se come barato y rápido. “Todo es rostizable”, dice.
The Roost: la rosticería chilanga, reloaded
Foto: Leonardo Pérez
No es un propuesta novedosa. Ya hemos visto desfilar por la ciudad a otras rosticerías “nais” con la misma idea: ofrecer un menú cien por ciento enfocado en un método de cocción, el rostizado, en un ambiente de restaurante, con tragos, vinos, chelas y sobremesa. Sin embargo, tener buenos productos, ofrecer platillos especiales por temporada –pato, lechón, jabalí– y tener una buena carta de alcoholes puede sacar a The Roost a flote –aunque le ayudaría una reflexión sobre su relación precio-calidad.
Qué está rico en The Roost
Su menú de 22 platillos muestra una buena ejecución del rôti. Por el rosticero –uno fancy que llegó desde Francia– pasan patos, baby back ribs, new york steaks, frutas, vegetales y por supuesto, pollo, la insignia del lugar. Este se prepara de dos formas: el finolis ($195) va marinado en hierbas finas; el bravo ($195) lleva un adobo de chiles guajillo, chipotle y pasilla. Para acompañar: ensalada de betabel tatemado ($120) con kale, crema de romero, vinagreta de balsámico, cacahuate caramelizado y queso Cotija. Sí, es de esos platillos golosos que confirman que ensalada no es sinónimo de light.
Foto: Leonardo Pérez
Si quieres algo menos dulce, el arroz al Josper (horno): un tipo risotto hecho con arroz bomba (el que se utiliza en la paella) con verduras rostizadas ($195).
Foto: Leonardo Pérez
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También tienen baby back ribs ($230) con bok choy (col), sazonadas con un rub de especias y un new york rostizado ($320), con costra de chiles y sal, por si se te antoja algo más sustancioso.
¿Y el postre?
Hay cornbread (pan de maíz) con helado de caramelo, o frutas rostizadas con crema montada de coco.
Los tragos en The Roost
La carta de vinos y cocteles es un valor agregado. La variedad es amplia (más de 20 vinos y 80 destilados) para un local tan pequeño. Podrías quedarte un par de horas más a echar el trago (recomiendo la Mexican Adita, $135, con mezcal, absenta, pepino, jarabe de eucalipto, jalapeño y agua tónica) si la música estuviera un poquito mejor curada y no la pusieran a volumen tan alto.
Fotos: Leo Pérez
The Roost
Dónde: Citlátepetl 55, Hipódromo Condesa
Horario: lunes a miércoles de 13:00 a 22:00, jueves y sábado de 13:00 a 02:00 y domingo de 13:00 a 20:00
Costo: $200–$300
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