Estos cinco lugares son nuevas adquisiciones de la comunidad japonesa. Todos tienen en común un toque de autenticidad que aleja cada vez más a los chilangos del mal rollo (ese que nos comimos durante mucho tiempo con queso crema y aguacate).
Tatsu
A los japoneses también les gustan las parrilladas, cuenta Yoshitake Tanaje, propietario de este restaurante que tiene como centro de atención unas brasas de las que salen especialidades como el atún con salsa de ajo -de corte grueso y sellado- o una carne de res con salsa teriyaki picante. Para complementar también hay rollitos (variados en texturas) y algunas entradas como los edamames.
Dónde: Palmas 275, Lomas de Chapultepec, 5202 4417, dom-lun 13-19 hrs, mar-sáb 13-23 hrs, $ promedio: 250 pp, TC: todas, tatsu.com.mx.
Fonda Japonesa
Este lugar es todo menos una fonda. Es un restaurante hecho y derecho, con servicio muy formal y una carta que se inclina por los fideos (secos o caldosos). Las porciones de las sopas son medianas, como para que tomes en cuenta a las entradas (edamames, kushiages) y a los rollitos.
Tori Tori Teppan
Es el nuevo integrante de la familia Tori Tori. Un excelente lugar para comer sushi (con las manos) y niguiris. Además, hay una rica ensalada de algas y un muy buen sushi cake de hamachi. Esta sucursal en la Roma es más informal que sus hermanas en Polanco así que no tienes que preocuparte por el dress code.
Dónde: Durango 205, Roma, 5233 3724, $ promedio: 400 pp, TC: todas.
Rokai
Este es uno de los lugares por los que la Roma envidia a la Cuauhtémoc. Es pequeño (un par de mesas, una barra y tan tan) y tiene una carta breve pero muy atinada de cocina japonesa. Lo ideal es el omakase (una degustación en manos del chef) y que procures no salir de ahí sin probar “la pesca del día” (a veces vela, callo de hacha, kampachi).
Taro
Este es uno de los lugares que no hay que dar por sentado. No es precisamente el más bonito pero la comida vale la pena. Una de sus especialidades es el Yakimiku (rebanadas finas de carne o pescado) que se sirven al centro para que las remojes en un caldo (el término es a tu gusto pero mientras más cocidas estén, el resultado será mejor).