Hot dogs hay en cada esquina, de tamaño estándar, con cebolla, jitomate, con sus respectivos aderezos, vendidos en combo (dos por uno o tres por dos). Todos nos salvan del retortijón del hambre aunque se acaben de dos mordidas. Sin embargo, entre esos lugares hay algunos que destacan, como los Hot Dogs La 23.
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Hot Dogs La 23, para el hambre más ruda
Llamados así en referencia al número de la clínica del IMSS que está frente a su ubicación, los Hot Dogs La 23 ya son famosos entre los habitantes del norte de la CDMX por su gran tamaño, precio y calidad de los ingredientes.
Su fundador, el señor Antonio Anaya cuenta que se inspiró en los hot dogs que venden en algunas partes de Estados Unidos: pan, salchicha, y rajitas crudas de chile verde con cebolla, nada más; él los tropicalizó con quesillo, tocino y otros ingredientes como piña, chorizo y champiñones. Tanto el pan como la salchicha miden 20 centímetros
Por si fuera poco, cada uno de los jochos se caracteriza por tener nombre de cuatro ídolos de la lucha libre mexicana que son amigos de don Antonio, a quienes incluso se les puede ver aplicando una llave al hambre.
El Guapito ($40) lleva champiñón y quesillo; el Shocker ($55) lleva tocino, queso, piña y queso crema; el Microman ($40) tiene chorizo y queso Oaxaca; por último está Depredador ($120) que le hace honor a su grandeza con un pan extra largo y doble salchicha sensualmente frita sobre la que va una cama de tocino, queso, piña, chorizo y champiñones. Cada uno entra con orgullo al salón del food porn.
Para el simple antojo están el sencillo ($30) con tocino o queso; el especial ($40) con tocino y queso; y el hawaiano con piña y queso. Hay para todos los gustos y presupuestos.
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Hot Dogs La 23
Dónde: Calzada San Juan de Aragón 510, frente a la clínica 23
Cuándo: lunes a domingo de 16:00 a 23:00
Costo: $80 en promedio. Sólo efectivo