La cuestión del tipo de copa y el vino, va más allá de la cuestión estética. Tomar un vino (o catarlo) en una copa adecuada puede transformar por completo la experiencia. Importa tanto el material, como la forma (son más angostas en la parte superior). Y sí, no son precisamente las más económicas. Olvídate de las "copitas", de los garigoleados en las paredes. Deben ser más angostas de la parte superior, transparentes (por que se necesita distinguir el color).
Las más conocidas son las Riedel (tienen cerca de 50 años en el mercado).Y puedes encontrarlas con facilidad en los Wine Bar (Polanco y Centro Histórico) o en tiendas gourmet.