Sabemos que agarrar una briaga tamaño familiar le quita la elegancia a los cocteles, y aprieta a nuestros –ya de por sí– exprimidos bolsillos. Y sí, por desgracia, nos encontramos justo en esa semanita previa a la quincena (de un mes con 31 días), así que las opciones para enfiestar sin afectar la cartera ni sacrificar la calidad se limitan. La buena noticia es que sí existen.
Que un coctel se sirva en grandes cantidades no quiere decir que sus ingredientes sean de mala calidad (sí, también nos acordamos de que en los 90′ se estilaban las temibles jarras de desarmadores con jugos de cajita o el manoseado y desvirtuado clericot, lo bueno es que aquel tiempo ya murió).
Los tragos con presentaciones por litro son una gran opción para compartir, muchos bares le han apostado a los tragos frescos y originales cuya presentación no se reduzca a un vasos o una copa.
Además, son rendidores y, en caso de que todo tu grupo se ponga de acuerdo, resulta práctico y barato elegir un drink “para compartir”.
Aquí van algunos.
El Azteca
¿Qué lo hace especial? No se trata de un brebaje ancestral sino de una novedosa propuesta que mezcla un litro de delirantes combinaciones etílicas con frutas tropicales (la receta es ultra secreta y solo descifrarás su contenido al probarla). Se sirve en jarras de a litro con forma de cabeza prehispánica.
Nota: Aunque los favoritos de este antro –que está entre lo hipster y lo fresa– son las probetas y los shots, esta jarrita tiene mucho que ofrecer al fiestero en busca de borrachera máxima.
Pídelo en: Chapelle
Bowl tiki
¿Qué lo hace especial? Éste es uno de los contenedores más nobles que ofrece este acogedor bar polinesio. Lleva media botella de ron o vodka (tú decides el fuertecito que más te guste como base). Va con una mezcla de cítricos y el toque secreto de la casa. Al primer trago te sientes feliz, el segundo desata la euforia y al tercero estarás completamente borracho porque significa que te lo bebiste solito.
Nota: Lo ideal sería que un bowl fuera mínimamente dividido entre dos, de otra manera no recordarás nada de los sucedido esa noche.
Pídelo en: Tiki bar
Cerveza clara
¿Qué lo hace especial? Aquellos amantes de la chela verán potenciado el sabor de la cerveza clara. Esta jarra es el mejor remedio contra las calurosas tardes de la ciudad. Básicamente, consiste en mezclar cerveza clara con alguna otra bebida dulce sin alcohol; en este caso es con Seven Up. Es un trago sencillo que va que ni pintado con unas ricas tapas.
Nota: El efecto suave de esta combinación podría desembocar en una guarapeta marca diablo; sobre todo, si te lo bebes como agua de horchata.
Pídelo en: 100 montaditos
Sangría Modelo
¿Qué lo hace especial? La sangría no es tinto de verano ni clericot. En este caso se trata de una nueva versión con chela con hartas frutas. Sin duda, no es tan sencillo como se lee pues nos encontramos ante una de las recetas más originales de este coctel. Esta jarra lleva licor de durazno, jugo de arándano, limón, naranja en rodajas, durazno en trozo, frutos del bosque y va coronado con un top de cerveza Modelo chope.
Nota: Ir por una sangría es un buen pretexto para brindar con este refrescante y accesible trago, mientras echas el cigarrito.
Pídelo en: La Chopería
Curado frappé de Maracuyá
¿Qué lo hace especial? Las jarras de curado frappé son un hit. Y aunque nuestro favorito es el de maracuyá, también tienes la opción de pedirlo de fresa, tamarindo, mango, café, frambuesa, jamaica y té verde, lima o guayaba. La lista es amplia y el hielo triturado le da un nuevo look al curado, su sabor también resulta más amigable para lo primerizos en las aguas de las verde matas.
Nota: Nada mejor para afinar gargantas que disfrutar esta jarrita en la próxima noche de karaoke.
Pídelo en: La Gavia