Qué mala pata
Amas tu coche con locura y frenesí y hoy tienes una cita que te tiene más queemocionado. Lo llevaste a lavar, aspirar y ya estás más que perfumado yarregladito para tu ligue nocturno. Se te olvida que es temporada de lluvia yque la ciudad es un caos. Estás a medioInsurgentes y tu auto comienza a convertirse en un catamarán. Ya no hay puntode retorno, lo único que te queda es acelerar a la alberca olímpica que tienesenfrente. Tu auto muere y no sólo te quedaste sin cita, te toca moverte enpatines durante los próximos seis meses.
La suerte del principiante
Eres el más hipster-fresa-fashion-cool de la cuadra, te invitan a todos loseventos y eres un twittero respetable. Tu opinión ya es lugar común en el DF yeres un ganador. Como sabes todo de antemano, ya te enteraste del nuevo lugararchi exclusivo que está por abrir. Tus amigos virtuales ya te preguntaron si ahí teven. Tú estás más que listo para tu noche de celebridad. Llegas a la 1 de la mañana, como acostumbras, y hay un caos afuera: enla entrada ya se hicieron bolas y se robaron la lista, utilizaron tu nombre y no hay manera de aclarar la situación. Todos los ñoños quellegaron a las 10:30 entraron y tú nunca lo lograrás. Al menos no esta noche. Y tus tragos favoritos iban a ser gratuitos.
Karma es súper perra…
El hubiera no existe
Te costó todo el tiempo delmundo entender que la mejor opción cuando sales de noche es moverte en taxi. Caminar, pedir aventón o irte gateando no está bien para ti. Ahora te la vives sermoneando a tus cuatessobre su codez (ya les alcanza para pagar los trayectos), su seguridad y sobre cómo la pasarían mejor. Sales con tu mejor amigo, lo malo es que debe irse temprano, decide llevarse su auto, lo malo es que se pone una guarapeta de campeonato y cuando se da cuenta de la hora se pone a hacerte un drama por la junta que tiene a las 8 de la mañana… Tetoca llevarlo… Intentas salir de la Roma y –¡chin!– te agarra el alcoholímetro…, elpoli ni en drogas te cree tu cuento de responsabilidad. Terminas refundido en losseparos, ¡suertudo!