Johnnie Walker celebró los cinco años de la fiesta más grande del mundo: la Gran Carrera. Se alió con Limantour, el único bar mexicano entre los diez mejores de Latinoamérica, para festejar este magno evento deportivo con tragos, música y arte. ¡Así se puso la F1ESTA de Johnnie Walker!
Fiesta, tragos y lo mejor de México en la #F1ESTA de Johnnie Walker
El GP celebró su quinta edición y Lewis Hamilton fue el ganador . Uno de los eventos deportivos más importantes del mundo no podía pasar desapercibido en la ciudad, por ello Johnnie Walker fue el anfitrión de una fiesta que disfrutaron decenas de chilangos aficionados a la Gran Carrera.
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Celebrada en un spot secreto de la ciudad y con un ambiente exclusivo, nos regalo una de las mejores noches del año. Entre la mejor coctelería de Limantour, dj sets únicos y un ambiente que solo los chilangos podemos darle.
El éxito de la #F1ESTA fue gracias a la fusión de sus cuatro ejes temáticos, todos ellos propios de la cultura de la Ciudad de México: música, comida, arte y coctelería.
Tragos
Los cocteles elaborados por Limantour, quizá el mejor bar de México (gracias a su nombramiento como uno de los mejores 10 bares en el mundo), fueron una sensación. Cuatro cocteles cumplidores, hechos con Johnnie Walker Black Label, con combinaciones que resaltaron lo mejor del whisky: Velvet John (con blueberries, limón verde y licor de cassis), Amore Milano (con jugo de toronja, limón verde, Angostura y Campari), American Walker (con Campari y Vermouth Rosso) y Black Mamba (con shrub de vino blanco, licor de ruibarbo, limón y agua mineral).
Arte
En cuanto a la oferta artística: Cocolab intervino un espacio con WEAVER, una pieza donde la tecnología y la tradición están entretejidas. Esta instalación representó la historia de los textiles mexicanos en cuatro etapas: los dioses, los colores, los textiles y los artesanos.
Música y comida
En la música, nuevos talentos mexicanos como Suricata y Tigo nos pusieron a bailar con sus dj sets; así como el acto estelar de Showtek, dúo holandés de electro–house, que ha tocado en los más grandes festivales de música electrónica.
Y para el bajón: La Barraca Valenciana, una de las torterías consentidas de la ciudad, fue la encargada de ponernos a tono y despedirnos con un gran sabor de boca de una de las mejores fiestas del Gran Premio.
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