La semana pasada, la compañía Peñafiel reconoció elevados niveles de arsénico –según lo establecido por la norma en Estados Unidos–, luego de un reporte de la organización Consumer Reports. Sin embargo, para tranquilidad de muchos, la Procuraduría del Consumidor (Profeco) determinó que el agua mineral Peñafiel no representa ningún riesgo para la salud.
El contenido de arsénico en el agua mineral Peñafiel no es un riesgo para la salud
“Con el estudio se concluye que el producto agua mineral sin sabor no representa riesgo para la salud de los consumidores”, indicó Profeco en un comunicado publicado este martes 30 de abril. Detalló que eso aplica para el agua mineral sin sabor y que las versiones de sabor aún están bajo análisis.
Peñafiel ya aceptó que su agua mineral tiene arsénico
Profeco detalló que la compañía dueña de Peñafiel, Keuring Dr. Pepper, “aclaró que las bebidas saborizadas presentan límites casi indetectables de arsénico en algunos casos y en otros por debajo del nivel establecido por las normas correspondientes, reiterando que no representa riesgo alguno para la salud de los consumidores”.
No obstante, la empresa “realiza trabajos de mejora en los Sistemas de Filtración de Agua en su planta ubicada en Tehuacán, Puebla y en la que se encuentra en Tlajomulco, Jalisco”, indicó la procuraduría. Ambas plantas habían suspendido el envasado de agua mineral en los días pasados.
Esto coincide con lo que explicó la doctora Margarita Eugenia Gutiérrez Ruiz, responsable del laboratorio de Biogeoquímica Ambiental de la Facultad de Química de la UNAM. En entrevista con W Radio, la especialista explicó que una “persona tendría que tomar siete botellas diarias de refresco por un buen tiempo para apenas estar en el límite de precaución”.
La doctora aclaró que la norma de EU redujo la cantidad de arsénico permitido en ciertos productos para “dar mayor seguridad a los consumidores”. Sin embargo, Peñafiel no contraviene la ley mexicana.
Las aguas subterráneas de varias partes de México —como Colima, según detalla este estudio–, tienen presencia de arsénico, un elemento químico natural de la corteza terrestre. La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha alertado de la gravedad del consumo humano de agua contaminada con arsénico, ya sea para beber, para preparar los alimentos o regar los cultivos.