La mercadotecnia dicta que el 14 de febrero es el día en el que todas las parejas se aman y son cursis. ¿Pero qué hay de todos aquellos que están solos por elección o porque cupido nada más no le atina? ¿Ellos no tienen derecho a tener un día especial (aunque sea sin besos ni arrumacos)? En Chilango pensamos que los forever alone no tienen porque quedarse encerrados en este día de harto romance. Por eso les conseguimos cinco lugares donde foreverear será lo que menos importe porque puede ser que liguen.
La Ópera Bar
Es una de las cantinas más tradicionales del Centro Histórico de la ciudad de México. Su historia comenzó desde 1870 y osa presumir el balazo que Pancho Villa incrustó en el techo. Si este 14 de febrero no andas de romántico, ve a echar el trago a este lugar y foreverea con elegancia en su espléndida barra traída desde Nueva Orleans. Disfruta de una gran variedad de tequilas, rones, brandys, cognacs y vinos tintos. Además de platillos como la paella a la valenciana, el pecho de ternera al horno y los camarones a la vinagreta. Es un hecho que por comida y alcohol no vas a sufrir.
Dónde: 5 de Mayo No. 10 Col. Alameda Central, 5512 8959.
Bros Oyster Bar
Es un pequeño restaurante, ideal para el forever alone masculino. Y no es que las mujeres no puedan ir, pero los clientes frecuentes son hombres. Si te decides por este lugar, no te preocupes por ir de a solito: puedes elegir un asiento en la barra. Para iniciar, échate unos Ostiones Bros (preparados en caballitos tequileros con salsa de la casa) y continúa con el Prime Rib sazonado con laurel, sal y pimienta y acompañado de dos tipos de puré de papa y espinacas cocidas. El servicio de bar es amplio, manejan cerveza de barril, embotellada y carta de vinos.
Dónde: Lope de Vega 226 Col. Polanco, 5250 1325.
La Celestina
Si bien el lugar es ideal para ir en pareja o con amigos, no te limites: la barra puede ser tu dulce compañía. Además, si gustas de la música indie, funk y soul, inmediatamente entrarás en ambiente y hasta te olvidarás que vas de forever alone. O, bueno, siempre está la opción de llevar a tu mascota pues es un bar pet friendly. De entrada, te podemos decir que las bebidas son un must. Ya sea un vinito, chela, mezcal o los imperdibles cócteles preparados por copa o litro. Pregunta por La Celestina, preparada con pulpa de frambuesa y vino blanco. En cuanto a comida, el menú se basa en los clásicos antojitos mexicanos.
Dónde: Caballo Calco 14A, col. Cuadrante de San Francisco, 5554 8920.
Zinco Jazz Club
Si en este San Valentín casi-casi quieres que te trague la tierra, éste lugar es para ti pues se ubica en las bóvedas subterráneas de lo que hace algunos años era el Banco de México. Para ti, solitario, la barra resultará un cómodo refugio mientras bebes el famoso mezcalini con tamarindo. De comer pide las bruschettas con tomate y mozzarella y los taquitos de arrachera marinada. Ahora sÍ, con el estómago lleno, disponte a escuchar las armonías del jazz que interpretan los músicos alrededor de las 22 horas y échate un whiskito.
Dónde: Motolinia 20, col. Centro, 5512 3369.
Bahía Bar
Si eres de los que escuchan sonidero, este lugar te encantará (aunque no tengas pareja con quien echar el baile guapachoso). En cuanto a tragos, encontrarás desde aguas locas de ron con coco o piña, pasando por cervezas y mezcal artesanal. No faltará el forever alone masculino que se enamore de una de las bartenders: chavitas con un outfit muy rockabilly y tatuajes. En cuanto a su menú, te recordarán mucho a una fonda tradicional en donde podrás comer la clásica milanesa con papas.
Dónde: Tolsa 36 Col. Juárez, 5709 6227.