“¡Voltéame a ver, voltéame ver, que yo también soy mujer!”. Con ese grito de lucha, la Contingenta de Mujeres con Discapacidad participa por tercer año consecutivo en la marcha por el Día Internacional de la Mujer en CDMX.
Serán alrededor de 150 mujeres con discapacidad y aliadas quienes durante la marcha del 8M visibilizarán el tema de la interseccionalidad y las distintas perspectivas desde las que se vive el feminismo de acuerdo con las circunstancias que atraviesan a las mujeres:
“Interseccionalidad es la presencia de diferentes factores sociales que combinados van generando una vulneración a los derechos”, explicó en entrevista para Chilango Jen Mulini, una de las organizadoras de la contingenta.
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¡Mujeres rodando también están luchando!
La contingenta de Mujeres con discapacidad comenzó a participar en la Marcha por el Día Internacional de la Mujer en 2022.
“Lo que buscamos es crear un espacio seguro, de confianza y que brinde elementos de accesibilidad para que todas las compañeras se sientan parte del movimiento”, comenta Jen.
Jen es una mujer con discapacidad motriz. La contingenta está conformada por otras mujeres que, como ella, son usuarias de sillas de ruedas. Además, participan mujeres sordas, mujeres ciegas y, en este 2024 se suman también mujeres autistas.
Violencia de género también es discapacitante
Además de mujeres que nacieron con discapacidad, en la contingenta también participan mujeres que adquirieron dicha discapacidad debido a la violencia de género. Tal es el caso de Licha Chávez.
“En 2020 vivió el intento de feminicidio por parte de su expareja, que la lanzó desde un curto piso. Ello provocó que perdiera una pierna y que se le incrustara una varilla en la cadera”, relata Jen.
A cuatro años de lo ocurrido, Licha sigue sin obtener justicia:
“La persona culpable sigue libre porque lo que le están pidiendo es un video donde se vea al culpable lanzarla”.
El caso de Licha es tan solo un ejemplo de cómo la interseccionalidad complica a las mujeres con discapacidad temas como el acceso a la justicia, a la salud y al empleo, entre muchos otros temas.
Salud, educación, empleo y justicia: demandas de las mujeres con discapacidad en el Día Internacional de la Mujer
En este Día Internacional de la Mujer, las mujeres con discapacidad marcharán por su derecho a acceder a la salud, a la educación, a empleos dignos y a la justicia.
Respecto al tema de la salud, Jen cuenta que hay comunidades en México en las que las mujeres con discapacidad no pueden trasladarse a una clínica o a un hospital. Ella es originaria de la huasteca hidalguense, y durante el tiempo que vivió allá no había rampas para que pudiera bajar desde el cerro con su silla de ruedas.
Otro tema es el de la salud sexual y reproductiva:
“Se nos sigue infantilizando, se nos sigue asexuando como si con discapacidad la vida sexual quedara totalmente eliminada. Incluso se siguen haciendo esterilizaciones forzadas a mujeres con discapacidad para impedir que tengan hijos”.
Por otro lado, las dificultades para acceder a la educación y al empleo se entrecruzan para ampliar la brecha de desigualdad en mujeres con discapacidad:
“A las mujeres con discapacidad, además de ser mujeres y formar parte de esta brecha salarial y de género, nos es muy complejo incluirnos dentro de un espacio laboral porque nos enfrentamos a más retos porque somos quienes tenemos menos acceso a la educación”.
Incluso hay desigualdad en las posibilidades para denunciar la violencia de género. “Si una mujer sorda quiere emitir una denuncia necesita intérprete de lengua de señas y muchas veces no los hay”, cuenta Jen.
Accesibilidad y sororidad en la marcha del Día Internacional de la Mujer
Las mujeres con discapacidad incluso han tenido que luchar para ser tratadas de manera igualitaria y tener condiciones de accesibilidad a la marcha del 8M.
“Anteriormente sucedieron situaciones que no nos hicieron sentir parte de toda la comunidad de mujeres”, reconoce Jen.
La historia de la contingenta de mujeres con discapacidad inició cuando Jen y su amiga, Karen, no encontraron condiciones para participar en una marcha:
Yo iba con una compañera que también es usuaria de silla de ruedas, Karen Rodríguez. Ìbamos avanzando, intentando encontrar nuestra contingenta entre todas las mujeres, y conforme íbamos avanzando, las chicas que nos rodeaban gritaban “¡Abran paso a las sillas de ruedas! Y en ese momento sentí decepción porque no me estaban viendo como otra mujer, sino como objeto.
Al año siguiente, en 2022, Jen creó la contingenta de mujeres con discapacidad. Tres marchas después, las condiciones son muy distintas. Cuentan ya con un espacio asignado. Son la cuarta contingente y se integran desde la Glorieta del Caballito una vez iniciada la marcha:
“La marcha va a salir de la Glorieta de las Mujeres que Luchan a las 4 de la tarde.Nosotras nos vamos a unir a la altura del caballito. Nos vamos a mantener en formación para luego unirnos en el espacio que tenemos asignado”.
Además, la contingenta se siente acuerpada por otras mujeres aliadas que apoyan con las distintas necesidades que tienen las mujeres con discapacidad. Hay quienes empujan a compañeras en sillas de ruedas. Otras guían a mujeres ciegas y les van compartiendo una descripción de lo que ocurre. E incluso hay cuatro intérpretes de lengua de señas para mujeres sordas.
Así, la interseccionalidad, la sororidad y las mujeres con discapacidad se hacen presentes en la marcha por el Día Internacional de la Mujer.
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