Ya sabemos que cuando setrata de quejarnos, los chilangos tenemos mucho de qué hablar y ésta no iba aser la excepción. Sin embargo, el tema es un tanto distinto a los que solemoselegir para despotricar, porque el bullying lleva años ahí, pero hasta hacepoco solíamos considerarlo algo común, y por lo tanto normal… hasta queempezamos a ver sus consecuencias.
Primero fue el reportaje de portada de nuestra última edición impresa (¿ya loleyeron?) y después los diputados legislando sobre el asunto. Lo cierto es queel acoso, que suele relacionarse con los niños, sigue presente entre losadultos, a veces con nombres distintos, pero con el mismo espíritu.
Decidimos entonces preguntara nuestros seguidores en Twitter cómo lo vivían y recibimos cientos derespuestas; eso sí, algunas parecen poner en la categoría de bullying todo loque les molesta, por lo que creímos conveniente ver cuáles eran susmanifestaciones típicas entre los niños y las ejemplificamos con lo quenuestros seguidores indicaban. Así que denle clic a lo que sigue mientraspiensan cómo han sufrido (o ejercido) el bullying.