Hospedarse en Ignacia Guest House es como viajar en el tiempo. Una casa de 1913, pero con las comodidades del siglo XXI. Cuentan con sólo cinco habitaciones, recién construidas bajo la influencia de la arquitectura escandinava (materiales rústicos y ventanales para favorecer la entrada de luz), que convergen con la antigua construcción y un jardín de cactáceas. Cada una está decorada con mobiliario contemporáneo, por supuesto wifi, televisión por cable y roku, sonido Bose, agua purificada de Casa del Agua, y productos de baño Loredana.

Sus paneles solares producen energía para la iluminación, la calefacción y las necesidades de la cocina, donde se prepara cada mañana un desayuno diseñado por los chefs de Casa Jacaranda, un lugar tradicional mexicano ubicado en el piso de arriba (cuentan con menú vegano y vegetariano). Después de las 17 h., hay cocteles.

Ignacia fue el ama de llaves que vivió ahí 71 años y que dejó su huella en las artesanías guerrerenses de la cocina y en los naranjos en el jardín. Inmersa en la colonia Roma, es capaz de encapsular la tranquilidad del barrio y hacer sentir a sus visitantes como en su propio hogar.

Jalapa 208-B, Roma, 2121 0966, ignacia.mx

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