Su grado de fanatismo…
Lo llevó a acosar a todos los actores que participaron en Star Wars, pero especialmente a la princesa Leia, la perseguía en convenciones de cómics, y no queremos saber qué porquerías más hacía con ella en su cabeza.
Su pecado…
Hacerse el graciosito. Y no sentir vergüenza. Qué oso.
¡Que hizo qué!
Fue a un programa de TV, se paró ante las cámaras y presumió que hablaba perfectamente el idioma Ewok, que se sabe de memoria todos los diálogos de las 6 películas, que trae tatuajes de los personajes de Star Wars… ¿Le seguimos?