Uno de los peores temores de los alumnos se ha cumplido: habrá algunos que regresen a clases en viernes. La Secretaría de Educación Pública (SEP) actualizó la lista de escuelas que reanudarán clases este 29 de septiembre en la Ciudad de México, luego que superaron las revisiones de especialistas y son consideradas como planteles seguros, tras el sismo de 7.1 grados que azotó al país el pasado 19 de septiembre.
Con el objetivo de no dejar dudas sobre qué escuelas son seguras para maestros y alumnos, las autoridades de la SEP insistieron en que se colocará un documento en la puerta de cada uno de los planteles verificados y aprobados.
Ese documento será el Dictamen de Seguridad Estructural, en el que se informa a los padres de familia que no hay riesgo en las instalaciones.
Este miércoles, el titular de la Administración Federal de Servicios Educativos de la Ciudad de México, Luis Ignacio Sánchez, afirmó que el ciclo escolar en la capital del país no se perderá, pero tampoco hay prisa para concluir con la revisión de las escuelas para verificar si fueron afectadas o no con el sismo del 19 de septiembre.
En entrevista, expuso que el derecho a la seguridad de los niños y maestros, así como la tranquilidad de los padres, es primordial para el Gobierno de la República.
Informó que de las más de 4,600 escuelas públicas en la Ciudad de México hasta el momento se han registrado 870 planteles con algún tipo de daño, en 20 los cuales son severos y van a requerir reconstrucción.
Explicó que la revisión se ha dividido en etapas y que la primera consiste en ir a las escuelas y zonas de la capital menos dañadas.
La segunda se hará sobre todo en las delegaciones más afectadas, que ahora están en restricción: Benito Juárez, Cuauhtémoc, Iztapalapa, Tlalpan, Tláhuac y Xochimilco.
¿Cómo se hace la revisión de escuelas?
En el recorrido, los expertos explicaron a los representantes de medios de comunicación la manera en que se certifican las escuelas y los pasos a seguir.
El arquitecto Max Betancourt y el ingeniero José Arturo Zárate indicaron que se revisa desde la fachada, se observan con detenimiento los muros, las trabes, las esquinas donde se juntan las columnas.
Bentacourt indicó que las grietas o fisuras que deben preocupar no son las verticales sino las que presentan una inclinación de 45 grados y se ven como diagonales, y las que se hacen en forma de cruz o taches.
En tanto, el ingeniero Zárate precisó que se debe diferenciar entre grietas viejas y las que pudo haber provocado el sismo del 19 de septiembre, y eso es porque las nuevas deben ser «limpias y tener polvo», y, ya detectadas, se debe medir la profundidad.
Después de la revisión, se determina el color del semáforo según su estado; por ejemplo, el verde corresponde a escuelas aptas para entrar en funcionamiento.
El amarillo se determina cuando se encontraron algunos daños de alerta y se agenda una segunda revisión (más minuciosa) para después; y el rojo significa que de plano no se puede entrar y mucho menos habitar, y ahí se ordena el desalojo; en estos dos últimos casos no se expide el certificado de seguridad estructural.