Para los ochenteros que aman la música en inglés, 1985 fue un año especial debido a que, por alguna extraña razón, muchos de los grandes éxitos de esa década surgieron o se consolidaron ese año.
La vida de la Ciudad de México cambió drásticamente durante los días que siguieron al terremoto del 19 de septiembre, pero la música siempre estuvo presente para muchos de los que hoy recuerdan algún instante de esa época al escuchar alguna de las canciones que fueron lanzadas ese año.
La Radio
Durante la primera mitad de los 80, la radio fue muy importante para difundir a los cantantes y agrupaciones que vendían más discos LP (todavía no había CDs y los “sencillos” ya casi no se usaban); sin embargo, había quienes decían que se medio ya estaba prácticamente muerto debido a la penetración que ya había logrado la televisión para esos años, lo cual se desmintió después del importante papel que jugó la radiodifusión durante la emergencia del terremoto de 1985.
Estaciones como La Pantera (590 AM), Radio Éxitos (790 AM) y Radio Hits (96.9 FM) estaban dedicadas al rock, y mientras el FM tenía un monótono formato de una canción+comerciales+una canción+comerciales, la AM conservaba los turnos de locutores que presentaban las canciones, recibían llamadas del público al aire y regalaban discos, despertadores y balones durante el día.
La radio musical tuvo grandes cambios en 1985. Un años antes, un joven talentoso llamado Luis Gerardo Salas (hoy lo encuentras en @LGSrock101) había fundado Rock 101, en donde se atrevía a poner al aire música y artistas que hasta ese entonces no tenían mucha cabida en la radio mexicana, como Peter Gabriel o David Bowie.
El 9 de septiembre de 1985, inició transmisiones otra estación de corte juvenil dedicada a la música en inglés: WFM. Ahí, las voces de unos arriesgados chavos llamados Alejandro González Iñárritu (sí, el de “Birdman”), Charo Fernández (hoy @Charofernandezr) y Martín Hernández empezaron a introducir los turnos en cabina (algo inexistente en FM y a producir cápsulas que ellos mismos bautizaron como “autopromocionales” y que aprovechaban todas las ventajas del género radiofónico para crear mensajes irreverentes, divertidos e innovadores.
En ambos casos, las canciones se presentaban con su título en inglés y no traducido al español, como era la usanza en otras estaciones de radio en donde los locutores presentaban a “Las Puertas” en vez de The Doors o “Espeluznante”, en vez de “Thriller”.
Por cierto, esto se debía a que así lo marcaba la Ley Federal de Radio y Televisión, la cual, técnicamente, sigue vigente hasta hoy, aunque ya no se respeta del todo.
Reconstruyendo la Ciudad
Una de las canciones que se estrenaron en la radio justo en los días posteriores al terremoto fue “We Built This City”, de la banda californiana Starship, pero en plena catástrofe de la Ciudad de México su título (“nosotros construimos esta ciudad”) no tenía mucho sentido y hasta era irrespetuoso, por lo que en algunas estaciones la presentaban como “Reconstruyendo la Ciudad”.
Aunque hay quienes de verdad odian esta canción, es una de las más icónicas de los 80 y, para muchos, fue parte del soundtrack de los días que siguieron al terremoto.
Video Rock
Para 1985, los videoclips ya habían revolucionado la industria de la música gracias a la llegada de MTV, canal que durante varios años no se pudo ver en México (algunos cuentan que se debió a la censura oficial, porque a una dama muy cercana al poder no le gustaban), pero que tenía sus propias versiones en la TV de cable y en la televisión abierta.
Y era en canal 5 donde se transmitía un original programa llamado “Video-Rock”, en donde la guapa conductora, Elsa Saavedra, presentaba los videoclips de artistas como Madonna (sus videos eran tan atrevidos que tenía que pasarlos en la versión de medianoche), Michael Jackson o el escandalosísimo Boy George (que cantaba con Culture Club).
Este programa fue tan importante que mucha gente decía “¿ya viste el videorrock de a-ha?” en vez de usar la palabra “videoclip”. El estudio y las oficinas de la producción de este programa se localizaban en el edificio de Televisa en Avenida Chapultepec, el cual se derrumbó durante el sismo del 19 de septiembre, por lo que salió del aire para siempre unas semanas después.
A propósito, esa banda noruega llamada a-ha fue la que revolucionó el mundo de los videoclips con una superproducción para promocionar su sencillo “Take on Me”, el cual quizá no hubiera llegado tan lejos sin ese memorable video que por primera vez mezclaba acción viva con una novedosa técnica de animación.
Dinero por Nada
Curiosamente, otro de los videoclips que revolucionó a la industria musical fue un tema que precisamente criticaba a ese género y a los cantantes de la época: “Money for Nothing”, de Dire Straits, también de 1985.
Ese video, premiado al año siguiente por MTV (a quien también se critica en la canción), fue el primero que se hizo completamente en computadora y que empleó en su animación a personajes humanos.
Hoy es un clásico del rock y todavía hay quien no sabe que los coros (aquellos que dicen “I Want My MTV”) son interpretados por Sting.
Volver al Futuro
Pero la música no sólo provenía de la radio y de la pantalla chica. Aunque la película se estrenó en México hasta 1986, a finales de 1985 se escuchaba en la radio la canción “Power of Love”, del soundtrack del filme Volver al Futuro (el cual se había estrenado en julio de ese año en Estados Unidos), y que era interpretada por Huey Lewis and The News.
En la película, durante la escena donde Marty hace una audición con su banda, Huey Lewis hace un cameo interpretando al juez que se pone de pie para interrumpirlo y con un altavoz les dice que quedan fuera del concurso porque su música es demasiado ruidosa.
En la radio de AM, esta canción era presentada por los locutores como “Volver al Futuro” y no como dictaría la regla: “El Poder del Amor” o algo parecido.
La OTI
Pero en la música en español también empezaba a haber cambios. Un par de semanas antes del sismo, la edición 1985 del Festival OTI México (el festival musical más importante que se realizaba en el País y que se transmitía por televisión a toda Iberoamérica) había sido ganado por la cantante Eugenia León, quien interpretaba el tema “El Fandango Aquí”, escrito por Marcial Alejandro y que era muy diferente a las canciones que solían ganar ese concurso (usualmente baladas), por lo que también se ganó varias críticas y hasta algunos enemigos.
“El Fandango Aquí” representó a México en la edición internacional de la OTI, que se llevó a cabo en Sevilla, España, sólo dos días después del terremoto, y se llevó el primero lugar, por lo que no faltó el envidioso que dijo que sólo había ganado debido a la tragedia que vivía el País.
Es una canción alegre, con una excelente interpretación de Eugenia León, pero que quizá no se convirtió en un gran éxito porque en esos días pocos supieron de ella; sin embargo, es un tema que inevitablemente recuerda a muchos esos difíciles días que se vivían en el DF.
Flans
La música en México durante la primera mitad de los 80 había sido dominada por cantantes como Diego Verdaguer, Amanda Miguel, José José, José Luis Rodríguez “El Puma”, Enrique Iglesias (sí, el papá de Enrique), Lucía Méndez, Emmanuel, José Luis Perales, Camilo Sesto y Juan Gabriel, por mencionar algunos, por lo que había poco espacio para la llegada de artistas nuevos.
El principal foro donde se presentaban los cantantes que dominarían la música en español era el programa de televisión Siempre en Domingo, conducido por Raúl Velasco, quien en 1985 también empezó a abrir ese espacio a nuevos artistas dirigidos a un público poco explorado: el juvenil.
Ese programa se transmitía todos los domingos por la tarde desde el “Teatro-Estudio Paco Malgesto”, un gran foro de televisión con butacas para recibir público en vivo (al estilo de los antiguos teatro-estudios de la XEW) y que fue destruido en el terremoto, por lo que debió mudarse a las instalaciones de Televisa en San Ángel.
Fue en esa nueva sede donde el 6 de octubre de 1985, unos días después del terremoto, debutó un trío de chicas que se vestían, cantaban y bailaban al estilo de Bananarama (un grupo británico también formado por tres chavas), pero que cantaban en español canciones muy pegajosas. Se llamaban Flans.
Esta agrupación formada por “Ilse, Mimi e Ivonne” provocó que millones de chavitas en el País se vistieran y bailaran como ellas mientras coreaban éxitos como “Me Gusta Ser Sonrisa” o “No Controles” (esta última canción fue escrita por Nacho Cano, del grupo español Mecano).
Soy un Desastre
El mayor éxito de Flans en ese año fue la canción “Bazar”, escrita por dos jóvenes compositores mexicanos llamados Carlos Lara y Jesús Monarrez, quienes creaban canciones para varios artistas importantes de la época (también interpretaban sus propios temas y hasta participaron en un Festival OTI).
Uno de los grupos que cantó canciones de “Lara y Monarrez” fue Timbiriche, que en 1985 hizo muy famosa la rola de “Soy Un Desastre”, que era interpretada por Diego Schoening.
Esta pegajosa canción estaba incluida en el disco Timbiriche Rock Show, que representaba una especie de “madurez” de este grupo que ya no era infantil, por lo que había dejado atrás las épocas de cantarle a Cocorito y del baile del sapo para interpretar temas como “Me Plantó”, “Corro, Vuelo, Me Acelero” y otros covers como “Mi Globo Azul” o “Teléfono”.
Los one hit wonders
Cuando una canción se vuelve muy famosa, pero su intérprete no vuelve a tener otro éxito similar se le califica como “one hit wonder”, y los 80 estuvieron llenos de ellos.
En 1985, alguien en un antro (aunque en ese año la palabra “antro” no se usaba para calificar a una “discoteca”, sino a u lugar “de mala muerte”) comenzó a tocar periódicamente la canción “Live is Life”, interpretada por una desconocida banda llamada Opus.
La radio retomó esa canción y pronto se hizo popular, tanto que esta banda austriaca vino a México para presentarse en programas de televisión como “Estrellas de los 80” (que era una especie de versión juvenil de Siempre en Domingo que se transmitía los sábados por la tarde) y hasta ofreció un par de conciertos en el DF.
Esta canción, que estaba grabada en vivo, fue la única de Opus que se convirtió en un éxito y después no se supo mucho de ellos por estas tierras.
Otras canciones memorables del 85
Una de las bandas que también era muy seguida por los mexicanos era Tears For Fears, especialmente por “Everybody Wants To Rule The World”.
Una canción que sonaba durísimo en 1985 era “Man in Motion”, interpretada por un desconosidísimo John Parr y que era el tema de la película St. Elmo’s Fire (en México se llamó El Primer Año del Resto de Nuestras Vidas), que trata de un grupo de amigos que se enfrentan a los días que siguen a su graduación de la universidad.
Cuando dos figuras se juntan, hacen magia, y eso es lo que hicieron David Bowie y Mick Jagger cuando interpretaron “Dancing in the Street”, en cuyo video se puede ver a ambos bailando al puro estilo del vocalista de los Rolling Stones.
https://www.youtube.com/watch?v=9G4jnaznUoQ
Otra canción de película que sonaba en 1985 era “The Goonies ‘R’ Good Enough”, de Cyndi Lauper, del filme The Goonies, el cual fue el deleite de muchos chavitos ochenteros que al fin veían una película diferente dirigida a ese público (el video es muy malo, pero es curioso ver actuar a Lauper).