¿Por qué amamos tanto las bodas?, a lo mejor y es porque son las fiestas más completas que pueda haber. Reúnen todo lo que nos gusta: conocidos, mucho alcohol, buena comida, risa y baile. Analicemos las 10 cosas que esperamos con ansias cada vez que nos invitan a una pachanga como esta:

 

1- Qué rola bailarán los novios

Es el momento más romántico de la noche. La rola que elijan los novios será el momento decisivo. Si eligen algo ridículo y horrible todos lo criticarán. Si eligen una rola increíble los solteros llorarán anhelando vivir un momento como ese.

 

2- Cómo se verá la novia

La cereza del pastel, lo más criticado o amado de ese día. Es increíble ver a una novia hermosa y reluciente. Si parece mona mal vestida en velorio no se la acabará. Todos morimos de morbo de ver si logró su cometido: verse más guapa que nunca.

 

3- Quién sacará el cobre

Nada es tan placentero en esta vida como ver al más mocho vomitando de la borrachera, o ver a las más tranquilas siendo las lobas del evento. Anhelamos ver el show que, los más borrachos, nos darán.

 

4- Quién llevará el peor vestido

Para elevar el autoestima sólo esperamos que todas se vean menos bien que nosotras. Cualquier error será criticado brutalmente. Sobre todo la típica que usa un vestido ridículamente formal en la playa o la que parece pariente de Laura León.

 

5- Qué palabras dirán en el brindis

No falta el imprudente que dice una que otra cosa que no debió decir. Disfrutamos los momentos que ponen en ridículo a los demás y, en especial, cuando los papás de los novios dicen indiscreciones que los ponen en jaque mate.

 

6- Quién hará el oso

No hay boda si no hay osos. Gran parte del show y de la diversión es que la gente se deje llevar de tal manera que todo pueda suceder. Anhelamos ver a alguien rodar, que algo se rompa o que alguien se aloque mal. Salimos satisfechos si tenemos una historia loca que contar.

 

7- A quiénes nos encontraremos

Nunca descartamos la posibilidad de que un ex novio(a) esté por ahí, o alguien que no nos esperamos. El factor sorpresa le da un toque extra y, aunque lo neguemos, en el fondo, deseamos que nos observen más guapos y arreglados que nunca.

 

8- Qué música pondrán

Si no hay buena música no hay nada y, aunque en casi todas las bodas ponen lo mismo, no falta la que sorprende por original y pone música increíble. Bailar por horas sin parar es algo que deseamos desde que anunciaron el compromiso, así que cuando llega el momento nos lucimos y sacamos fuego en la pista.

 

9- Quién se va agarrar con quién

Tanta convivencia y alcohol de por medio facilitan el afloje. Quienes menos lo esperamos terminan en los brazos del feo de la fiesta y las más feas con los más guapos. En las bodas no se discrimina y después de cinco tequilas todos son sexies.

 

10- Cuánta lana derrocharon

No es una ley que dentro de más dinero gasten, mejor sea la fiesta. Luego nos llevamos la sorpresa de ir a una boda sencilla y que resulte la más divertida. Nos encanta criticar los excesos de lujo o los gustos folclóricos de los parientes.