Pared pizarrón:

La mejor forma de decorar una pared de tu casa es con pintura negra: funcionará como pizarrón. Llénala de dibujos o coloca una caja de gises para tus amigos, así cuando te visiten podrán ayudarte a decorar. Si no se te da el dibujo, pon frases que te guste leer a diario.

Compra antigüedades:

Muchas veces es más económico comprar cosas vintage que cosas modernas. Está de moda este estilo y pueden darle un toque muy interesante a tu hogar. El mercado de la Lagunilla es una excelente opción para comprar mesas, sillas, sillones etc. 

Repisas y libros bonitos:

No es necesario que gastes miles de pesos en muebles para colocar tus cosas. Una forma increíble de decorar tus paredes es con repisas para libros y objetos de diseño. Aquí lo importante será que compres libros con una portada linda para que –además– sirvan como adorno. Junta todos los libros de arte que tengas  y ponlos de forma asimétrica.

Percheros pintados de colores:

Compra unos percheros de plástico en cualquier tlapalería, píntalos de colores verás que un toque tan sencillo y que no te lleva más de 5 minutos realzará la belleza de tu puerta de entrada. Si te gusta entrar en detalles, elige lo que cuelgues para darle más colorido.

Marco falso:

Es muy caro enmarcar los cuadros que queremos tener en casa, y cuando se trata de un espejo, más. Ya que no nos conformamos con uno simple, queremos algo sofisticado y que haga lucir nuestro reflejo muy bien. Para esas ocasiones donde el dinero es un problema, compra una cubeta de pintura, cuelga el espejo y alrededor de él  pinta el marco. Dale la forma que quieras, en cuestión de minutos harás lucir tu espejo como el más original del mundo.

Cabecera falsa:

Lo mismo sucede con las cabeceras, es dificil encontrar una que nos guste a precio accesible, pero ¿para qué gastar? píntala tu mismo. Inventa un diseño, trázalo y cubre todo su contorno con papel y masking tape para que no te salgas. Si no eres muy bueno para las manualidades, pídele a tu amigo el más artístico que te ayude.

Forra las pantallas de tus lámparas:

Una pantalla simpre en blanco no tiene el mismo efecto que una con tela de los colores de tu habitación. Compra un metro de tela en cualquier tienda de telas y forra tu mismo. Con silicón y doblando las orillas hacia adentro no tendrás no que gastar en una costurera. Si quieres darle un toque extra, compra una tela lisa y un encaje para poner por encima.

Paredes con esténciles:

Esta moda del estencil es una buena opción para llenar tus paredes de vida y gastar poco. Los venden en cualquier tienda de decoración y hay de todas las formas que imagines, podrás poner arboles, hojas, pájaros, un espejo, etc. Pégalo con mucho cuidado para que no se le hagan burbujas.

Crea tus propias almohadas:

Compra un metro de tela de manta, cuesta poco y se tiñe de manera facil, también compra tintes para tela y relleno para almohada. Pinta las tela del color que quieras, usa la antigua técnica hippie de ligas. Corta la tela de los tamaños que quieras, cose las orillas, no necesitas ser experto pues al final voltearás esa la funda y no se verán los bordes. Coloca el relleno una vez que esté volteado.