Confesiones de un paseador de perros
Confesiones de un paseador de perros. ¿Cuánto ganan?¿Qué opinan de los "perrhijos"? ¿Qué razas son las más difíciles? Aquí las respuestas.
Por: Pável M. Gaona
Sin ser Batman o Supermán, Jair tiene una doble vida: estudia la carrera de Ciencias de la Comunicación y en sus ratos libres acude al llamado de aquellos que requieren una mano con sus mascotas y no tienen tiempo de sacarlos a echarse una vuelta. Él es paseador de perros, uno de los oficios que actualmente se están popularizando en la ciudad y nos contó con pelos y señales —literalmente— cómo es un día a día en su chamba.
-¿Cómo es que supiste de este oficio y cómo te convertiste en uno?
Desde que tengo uso de razón me han gustado los perros. En la familia tenemos uno que se llama Benito, y como siempre me estoy tomando fotos con él y subiéndolo a mis redes sociales, uno de mis amigos me etiquetó en una publicación de una app que se llama “Paséame”, y es ahí donde me enteré. Me registré para el proceso de certificación y después de una capacitación y de unos exámenes psicométricos me convertí en un paseador. Es un proceso breve, pero a la vez muy cuidado. Desde que me etiquetaron hasta que ya fui paseador certificado pasaron unas tres semanas.
-¿En qué consisten los cursos, o cuáles son las habilidades que ustedes tienen que desarrollar para convertirse en paseadores certificados?
Te enseñan varias cosas. La primera de ellas es que debes saber identificar cuando un perro está sano y es apto para salir a pasear. También tienes que checar que no sea agresivo, por seguridad tanto tuya, como de los otros perros o de terceros. Una cosa que es muy importante es que nos enseñan a evitar conflictos y también a darles paseos agradables a los perros, sin jaloneos. Me tocó ver a gente a la que esto se les complicaba y no pasaban la certificación, esto es algo que toman mucho en cuenta en tu evaluación.
-En el caso hipotético de que un perro se ponga agresivo con otro perro o con un transeúnte, ¿los capacitan para ello?
Los perros que son agresivos se les ve desde el momento de recogerlos y yo para evitar este tipo de problemas no los tomo. Pero ya si se presenta un problema, en el curso nos enseñan que hay que jalarlos de las patas traseras para que además de que pierdan un punto de equilibrio, en caso de que tengan las mandíbulas prensadas en otro perro, esto ayuda a aflojarlas. En caso de que el perro llegara a atacar a una persona, lo que tengo que hacer es comunicarme de inmediato con la app y ellos ya son los que nos orientan de inmediato sobre cómo proceder.
-En tu experiencia, ¿cuáles son las razas de perro más difíciles de controlar?
Los labrador y golden. No es que sean violentos, pero son perros hiperactivos y muy juguetones ,y por su tamaño hacen que sea difícil su manejo. Hay otras razas como los chihuahua o los french poddle que sí son más agresivos, pero por su peso y tamaño no representan problema, no son difíciles de controlar.
-¿Qué pasa con la fama que tienen los pitbull como perros agresivos o de ataque?
No me ha tocado pasear ninguno, pero tengo amigos que sí tienen y son perros muy amigables. La verdad es que tanto el pitbull como el bully que es muy parecido, son perros que me gustan mucho y me gustaría mucho poderlos pasear. Espero que me toquen pronto.
-¿A qué crees que se deba que exista cada vez más demanda de este oficio? ¿Dónde hay más chamba?
Es en las zonas pet friendly, como la Roma o la Condesa, hay más chamba porque hay más familias con perros. Son zonas es las que es muy marcado que la gente —y aunque suene feo—, prefiere tener un perro a tener un hijo. ¿Por qué? Quizá porque es más barato o no generan tanto problema y tienden a dar mucho afecto. Y como la gente no siempre tiene tiempo, a veces necesitan de una ayuda y ahí es donde entramos los paseadores.
-¿Qué opinas de la gente que dice que sus perros o sus mascotas son sus hijos? ¿Te parece válido?
Los perros son animales que te dan mucho cariño y es una forma en que la gente les devuelve algo de ese cariño. Si hay gente que los considera sus hijos, yo estoy totalmente de acuerdo en que lo hagan. Si ellos nos tratan como sus padres, ellos merecen que los tratemos como hijos.
-¿Cuánto ganas al mes como paseador y cuánto tiempo le inviertes?
Por cuestiones de la escuela y que no quiero descuidar la carrera, la verdad es que no puedo invertirle tanto tiempo y por lo tanto yo lo veo como un extra que me ayuda con pasajes, gastos y demás. Por ejemplo, en el pasado mes y medio trabajé nada más como de 30 a 38 horas más o menos. Y por eso me gané entre 2800 y 3000 pesos. En realidad le invertí poco tiempo, unas 6 horas a la semana, pero como llevaba de dos a tres perros por viaje, me convino y pude sacar buenos números.
-Y hablando de llevar varios números al mismo tiempo, ¿qué onda con esos paseadores que llevan hasta 10 o más perros que hasta parecen globeros? ¿No tienen un límite de perros que puedan pasear, por seguridad?
En la app de paséame eso es muy claro: nosotros podemos llevar hasta 5 perros. La misma app en cuanto llegas a ese tope, ya no te busca más. Yo en lo personal llevo dos o tres. Si ya me llega una solicitud par pasear un cuarto perro, no los acepto. Eso es más seguridad tanto como para los clientes como para mí, así les brindo un mejor paseo y evitamos problemas.
Finalmente, ¿qué opinas de estos videos que se han hecho virales en los que los paseadores maltratan a los perros o que los dejan amarrados?
Es una bajeza. Ver el maltrato hacia otro ser vivo, ya sea perro, humano o lo que sea, es una real bajeza y es muy cruel. El el caso de un animal, él no puede gritar, no puede decir que le duele, no puede pedir que ya no lo maltraten. Los paseadores que dejan a los perros amarrados son nefastos. Entiendo que nuestro trabajo pueda ser cansado, pero no se puede dejar un perro amarrado por más que tenga sombra. En mi caso, cuando me canso, busco un lugar donde pueda estar sentado con ellos acariciándolos, nunca los dejo solos. Si tengo ganas de tomarme un agua, la llevo mejor desde antes en mi mochila y listo. Si quieres ser paseador tienes que estar preparado y no cometer bajo ninguna circunstancia estas acciones. Si esa gente no quiere pasear perros pues que no le entre, nadie los obliga, dejan en mal a quienes desarrollamos este oficio con dedicación y con afecto.
¿Qué opinan chilangos? ¿Ustedes le entrarían a pasear mascotas? ¿Le confiarían a alguien más el cuidado de sus perrhijos?