Chilango

¿Cómo parecer inteligente?

Raffaello Sanzio

Ojo: una persona verdaderamente inteligente no necesita manuales que le digan cómo hacer que los demás se den cuenta de que lo es. 
 

1. Usa lentes

Por alguna razón, todo el mundo asocia la debilidad visual con un alto coeficiente intelectual, así que: usa lentes aunque no los necesites; nadie tiene que enterarse. Cuando estés solo, puedes descansar de tu look de cuatro-ojos. Hablando de esto, evita escotes, o ropa excéntrica: puntos menos de C.I.

2. Aprende unas cuantas palabras en otro idioma

Escoge algún idioma –de preferencia que no sea inglés porque ya todos lo hablan– y aprópiate de varias palabras. Tus amigos van a pensar que eres medio mamila cuando los saludes con un “Salut!” en vez de un simple “Qué onda”, pero en el fondo te envidiarán por políglota. Y ya que estamos en eso, escucha música extranjera delante de los demás, aunque no tengas idea de lo que dice. A fin de cuentas, tus ignorantes amigos tampoco lo saben. 

3. Usa palabras “raras”

Llegó el momento de darle un buen uso al diccionario. Trata de incorporar a tus conversaciones cotidianas palabras como “inconspicuo”, “pretencioso”, “dicotomía”, “yuxtaponer”, términos filosóficos, científicos, y cualquier rareza del lenguaje que llame tu atención, y que te suene a que nadie de tus círculos sociales usaría. 

4. No te impresiones por nada

¿Tu amigo terminó un doctorado en física cuántica? ¿Encontraron la cura del cáncer? Te vale. Tú podrías hacer algo mejor (aunque nunca lo demuestres). Siempre que alguien que no seas tú haga algo importante o grandioso, ignóralo. Convierte el avance más innovador de la época en cosa de niños. 

5. Aprende datos curiosos

¿Te acuerdas de ese juego de Maratón que tienes arrumbado en la profundidad de tu clóset? Saca las tarjetitas y apréndete todo lo que puedas. Una vez logrado esto, busca momentos en todas tus conversaciones para sacar a relucir tu nuevo conocimiento. Si el dichoso momento no llega, ¿qué importa? Abre tu bocota de todas formas. A todos les encantará saber que “karaoke” significa orquesta vacía en japonés, o que todos los seres humanos estuvimos compuestos por una sola célula durante media hora. 

Milhouse (Especial)

 

6. Nunca digas que ves la televisión

Sí, sabemos que viste de principio a fin Pequeños Gigantes y que eres más confiable que la guía de programación de la tele, pero, como siempre, nadie tiene que enterarse. Tu “yo” intelectual no ve la televisión (a menos que sea Discovery, o History Channel) porque odia que llenen su cerebro de basura. 

7. Carga un libro

No lo tienes que leer si no quieres. Sólo te tienen que ver con él. Lo que sí, es que siempre debes leer reseñas y otras opiniones en Internet, o ¿qué vas a hacer si alguien te pregunta de qué se trata? Parecer inteligente requiere un poco de preparación. Cambia tu libro cada dos semanas, aproximadamente. Ojo: quiérete un poco y evita que esos libros sean tipo “Hombres de Marte y Mujeres de Venus”, “El Macho Alfa”, o cualquier libro que prometa que traigas loquito al sexo opuesto.

8. Paséate por las librerías

Muchas tienen cafecito, una razón buena para estar ahí. Ojea los libros, y actúa como el literato que quieres parecer. Siéntate a leer, aunque no tengas idea de lo que habla el libro. Recuerda, para nuestros fines, la imagen lo es todo.

9. Asiente

Cuando alguien te cuente algo, asiente como si ya lo supieras. Recuerda que no hay nada que los demás puedan enseñarte, ¿cierto? Al mismo tiempo, debes hacer una expresión de “es evidente”, para enfatizar la idea de que no te están diciendo nada nuevo. 

10. Ve cine de arte

La Cineteca Nacional será tu nueva mejor amiga. Mientras más lejano sea el país, y más raro el idioma de la película que vas a ver, mejor. No olvides twittear dónde estás y el nombre de la película en idioma original. Al final, critica la película, pero nunca aceptes que te gustó: siempre tiene que haber un “pero”. Recuerda que debes ser una persona de gustos exigentes. También, evita que la gente te vea entrando a ver cintas comerciales, de esas que en realidad te gustan. 

 

Estos pasos te ayudarán a verte inteligente; sin embargo, con el paso del tiempo la gente se dará cuenta de que eres pura pose. Si realmente quieres ser intelectual, lee libros completos, no uses lentes si no los necesitas, y no quieras aprender por aparentar ser algo que no eres. Ten un verdadero interés –y muchas ganas– por aprender.