Con está última entrega de Harry Potter, era de esperarse que las salas del cine estuvieran abarrotadas de fans vestidos de magos. Sin embargo, en esta ocasión no sólo vimos a las versiones mexicanas de los personajes buenos, esta vez hasta los mortífagos estuvieron presentes.
Las capas, varitas mágicas, lentes, y tatuajes de serpientes estuvieron muy presentes en esta función que logró llevar a los cines del país a miles de fans, a presenciar la última aventura del famoso niño mago, cuya primera película se presentó en el 2001.
Al final de la película, todos salieron felices, pero invadidos por la nostalgia que causa saber que ya no existirán más aventuras e historias del Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería. Pero hay que recordar lo que dijo JK Rowling en el estreno en Londres: “[Harry Potter] es mi bebé, y si quiero sacarlo a jugar otra vez, lo haré”.