Un jefe en pañales
Un jefe en pañales trata de un bebé, que viste traje y corbata, que tratará de detener los malvados planes del director de la empresa Puppy Corporation.
Por: Oswaldo Betancourt Lozano
Tim es un niño de siete años y tiene una vida feliz a lado de sus padres, hasta que llega su hermanito, un bebé que siempre viste de traje y no pierde su portafolio, pero pronto Tim descubre que este recién nacido ha llegado para cumplir una misión que está poniendo en riesgo a su compañía.
Cuando vi el primer tráiler la verdad no me llamó mucho la atención, pero vale la pena darle una oportunidad, es más divertida de lo que esperaba, cuenta con animación de calidad y tiene un planteamiento interesante. Vayamos por pasos.
Michael McCullers adaptó el libro homónimo e ilustrado de Marla Frazee, pero el guionista tiene entre sus créditos el haber escrito para el programa Saturday Night Live y dos películas de Austin Powers, de ahí que el libro infantil terminara en una película dotada de un humor diverso que hace reír a niños y adultos por igual. Esto viene acompañado de un par de momentos graciosos pero extraños y más dirigidos a los últimos, aunque el libreto viene lo suficientemente blindado para cuidar a los más pequeños.
Un punto a favor de la película de Tom McGrath (Megamente y codirector de la trilogía de Madagascar) es que maneja un tipo de animación diferente para los momentos en que Tim libera su imaginación, lo cual le da mucha agilidad y hace que la película sea atractiva para el ojo.
El doblaje está muy bien, pero si eres de los que se inclinan por idioma original, 20th Century Fox también traerá copias subtituladas para poder disfrutar el trabajo de Alec Baldwin, Steve Buscemi, Jimmy Kimmel, Lisa Kudrow
Si bien podría pensarse que la película es para quienes tienen un hermano menor o para los padres de familia, también podría caerles en gracia a todos los amantes de los animales, pues la trama habla de un fenómeno interesante a nivel mundial: cómo los cachorros (y las mascotas en general) han ocupado el lugar de los bebés en las familias. Afortunadamente la historia no se convierte en un mensaje moralista, y a pesar de que el final es predecible, no resulta chocante