'Huérfanos', la película que los políticos deberían ver
Por: Oswaldo Betancourt Lozano
Mucho del cine histórico mexicano está lleno de estereotipos, pero Huérfanos no es el caso, aquí vemos a un Benito Juárez que le fascina bailar y cantar alejado del hombre estoico que conocemos. Así como con el presidente, vemos a Melchor Ocampo tanto en su vida privada como en la carrera política, pero con sus defectos y virtudes.
La cinta de Guita Schyfter (GS), protagonizada por Rafael Sánchez Navarro (RSN), le valió una nominación al Ariel a Dolores Heredia (DH). Platicamos con la directora y los actores sobre la película.
¿Por qué quisiste hace una película sobre este personaje?
GS: Yo no escogí a Melchor Ocampo, él me escogió a mí,siempre me burlo de esas frases, pero ese lugar común es mi caso ahora. Yo estaba buscando un proyecto y había oído hablar de él por la calle, pero nunca me había puesto a pensar quién era, hasta que durante una cena con Patricia Galeana hablamos de los personajes del siglo XIX y me platicó sobre Ocampo, cuando supe que era huérfano me llamó muchísimo la atención.
Los paisajes son uno de los fuertes de las películas
GS: Yo nací en Costa Rica, mi teoría es que una gran parte de los extranjeros que vienen a México se quedan fascinados con el país por su colorido, la cultura indígena, la arquitectura y el extraordinario paisaje, a uno se le va un poco la respiración, como con la construcción de San Juan de Ulúa.
Además, quería retratar la época que va de 1814 a 1860, así que investigamos muchísimo en libros, de ahí salieron los aspectos de la decoración y las costumbres de la época.
DH: Las imágenes de esta película son deliciosas, la música las acompaña de una manera muy rica, hay grandes actuaciones y es una manera muy fresca de asomarnos a la historia
RSN: Cómo ayuda trabajar en una hacienda real, subirte en una carreta de la época, hay que saber aprovecharlo, un gran mérito de la película es la fotografía. El paisaje inspiraba muchísimo y nos recuerda la maravilla de país que tenemos y nuestra gran responsabilidad de cuidarlo.
También hay una historia de amor
DH: Ocampo pensaba que la diversidad hacía una riqueza. En la película vemos tres aspectos de su vida de un hombre: Su vida personal, su amor y su paso en la política.
Siento que ella es fundamental, está ligada a él. Ella es una contraparte, es él de alguna manera, son hermanos, son amigos, son hijo y madre, son todas las relaciones posibles, de allí surge también ese hombre.
RSN: Hay un contraste entre su vida política, duro, recio, intransigente con sus metas y sus ideales, y por el otro lado era un ser muy encariñado con su familia, era amoroso con sus hijas y con su pareja-madre-nana-etcétera.
Su historia de amor es compleja: Son huérfanos los dos y en los últimos años de su vida se vieron muy poco, él tenía tantas responsabilidades y la distancia era muy lejana, más a caballo y en carreta, pero se amaron profundamente, más allá de la cercanía.
¿Cuáles fueron los retos de la cinta?
GS: Lo más difícil fue conseguir el financiamiento, a nadie le interesaba la historia de Melchor Ocampo que es tan importante para el México moderno, toque puertas una y otra vez.
DH:Me encantó hacer este personaje, para mí fue un regalo enorme. Pude jugar con las edades, no sólo exteriormente, aunque trabajé de la mano con el maquillista y con el peinador, me refiero al trabajo interno, entrar al recuerdo, sentir ese mariposeo.
No es que veamos a Anita muy vieja, sino que está muy deteriorada: su piel se mancha, se le cae el cabello, pierde la vista, se va enfermando, se va acabando, lo único que la mantiene viva es el amor. Ese fue uno de los grandes retos de la película.
RSN: Lo más difícil fue… el calor, nos estábamos derritiendo, y luego con los vestuarios. Hablando en serio, difícil todo, todos en la producción trabajamos con mucha responsabilidad y respeto en este proyecto, por el tema que estábamos tocando. Cada frase, cada momento, cada situación esencia, pero lo que lo hizo más fácil fue tener un gran libreto de Hugo Hirirat.
¿Por qué es importante verla?
DH:Ocampo es un personaje central en la historia del país y casi nadie lo conoce. Cuando escuchamos “histórico” pensamos en aburrido, nos han enseñado a no querer voltear pa’ atrás, y esa es la única forma de entendernos.
RSN: Voltear al pasado para ver cómo eran los políticos en nuestro país, gente que entregó la vida a los grandes ideales, al amor por este país, con el paso del tiempo eso se ha ido desgastando. Si tuviera que equiparar a esos héroes con los políticos actuales, te diría que ninguno se le acerca; yo sería feliz si le mandaran una copia a cada uno de los partidos políticos, para que pensaran en la gran responsabilidad que tienen con sus compatriotas y con nuestro país.
La patria está lastimada y maltratada. Tenemos una enorme necesidad de seres humanos así, sobre todo en este momento tan terrible, tan triste, que está atravesando nuestro país. Ojalá en las nuevas generaciones estén naciendo o creciendo personas como las de la Revolución, la Independencia, la Reforma, porque cómo las necesitamos.