A más de 35 años de una de las películas más emblemáticas del cine de terror y una de las obras más importantes del director Stanley Kubrick, la película basada en el texto de Stephen King, El resplandor.
Después de haber realizado la película Barry Lyndon, la cual no fue un éxito comercial, Kubrick, conocido por su obsesión por la perfección y por sus encuadres perfectos, quería crear una obra que tuviera más impacto en el cine. Los ejemplos ya estaban con la cinta de William Friedkin El exorcista; con La profecía e incluso Alien de Ridley Scott.
Kubrick y la guionista Diane Johnson usaron el texto de King como un pretexto para desarrollar su historia, incluso al propio Stephen King no le gustó el tratamiento que se hizo a su libro y odia la película.
Existen muchas teorías de conspiración sobre la cinta, son tantas que incluso se realizó un documental en donde se muestran algunas de ellas. La cinta del director Rodney Ascher Room 237 muestra el punto de vista de varios fanáticos obsesivos de este filme. Unos dicen que es una analogía al holocausto de los nativos americanos por parte de los colonizadores europeos.
Otra de las teorías más extrañas es que El resplandor muestra en realidad que el viaje a la Luna, en donde Danny usa un suéter con el Apolo 11, es una referencia al mito urbano que dice que Kubrick grabó todo en un set en Hollywood.
Dentro de la obsesión por la perfección, Kubrick tiene el récord de mayor número de tomas hechas en una película, en la famosa escena en la que Wendy amenaza con un bat a Jack.
Es sabida su afición por la imagen, incluso Kubrick trabajó como fotógrafo antes de dedicarse al cine. La famosa escena de las niñas tomadas de la mano, es una inspiración del trabajo de la fotógrafa Diane Arbus.
Kubrick construyó el miedo en la película poco a poco con el uso la cámara, sus encuadres y con la música de Wendy Carlos, pionera del uso del sintetizador.
Otro elemento importante es ese extraño final: ¿todo ya había pasado? ¿Jack siempre vivió ahí? ¿Se trata todo de una gran broma de Kubrick? Esa conversación en el baño con el antiguo cuidador del hotel Overlook, Delbert Grady, deja más dudas que certezas sobre lo que pasa en realidad en esta cinta influyente en el mundo del cine.
