Nunca es fácil terminar una saga icónica y menos cuando se trata de una que marcó a varias generaciones a lo largo de casi cuatro décadas. Con Star Wars El Ascenso de Skywalker, J.J. Abrams tenía la gran responsabilidad de concluir con esta guerra intergaláctica entre el bien y el mal.
Después de un año de los acontecimientos de Los Últimos Jedi, esta película capta a nuestros héroes preparándose para la última batalla. Sobre todo porque (sí) el Emperador Palpatine está de regreso y planea apoderarse de todo.
Antes de alcanzarlo, Rey deberá enfrentarse al supremo líder Kylo Ren y esperar que la Fuerza la acompañe en esta última batalla.
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Star Wars El Ascenso de Skywalker: el fin de un legado
Quizás no hay fandom más aguerrido que el que rodea a la franquicia creada por George Lucas en el lejano 1977. Es por ello que no importa el resultado, ningún final logrará realmente complacer a todos.
J.J. Abrams lo sabía e hizo su lucha presentando una cinta que parece querer darle gusto a los fans más que cerrar un ciclo de manera redonda. Como resultado, Star Wars El Ascenso de Skywalker es entretenida, con sorprendentes visuales, batallas con sables láser y muchos (demasiados) personajes.
También hay un exceso de escenarios y problemas, que hacen que cualquiera se sienta un poco desorientado.
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Abrams intenta dar respuesta a muchas de las interrogantes pasadas demasiado rápido y, mientras aborda algunas que parecían ya no tener relevancia —como quiénes son los padres de Rey—, ignora por completo otras que sí eran importantes (como los caballeros de Ren).
Lo que más lamentamos es que, al emprender este maratón de explicaciones, Abrams sacrificó la humanidad y esencia de varios personajes y los nuevos, como Jannah y Zorii Bliss, parecen estar ahí solo de relleno.
Además, hay momentos en que pasan cosas muy impresionantes, pero no hay tiempo para lidiar con ellas, ya que la trama y los involucrados pasan rápidamente al siguiente problema.
En cuanto a Rey y Kylo Ren, desde El Despertar de la Fuerza sabíamos que sus caminos estaban destinados a cruzarse, pero es hasta Star Wars El Ascenso de Skywalker que realmente entendemos la complejidad de su rivalidad. Algunas de las escenas más emocionantes de la cinta corren a cuenta de sus enfrentamientos.
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Nuestro veredicto: Star Wars El Ascenso de Skywalker es una película que no sorprende.
Hay que reconocerlo, J.J. Abrams debió aprender una sola cosa de Rian Johnson: arriesgarse. Al final, se siente como si hubiera decidido desaprovechar todas las posibilidades que se destaparon con la película previa y simplemente basarse en una fórmula ya probada, pero no siempre bien lograda.
De lo bueno, podemos decir que Star Wars El Ascenso de Skywalker tiene momentos de risa, tensión, drama, muchas emociones y, lo más importante, cierra el legado de los Skywalker.