A partir del 12 de septiembre del 2024 podrás ver en cines Un paseo con Madeleine, una película que, si no te hace llorar, te dará una retrospectiva de la vida bajo una mirada comprensiva. Recuerdos, una banda sonora romántica y las calles de París: la fórmula perfecta para este filme.

Aquí en Chilango nos lanzamos a verla y te contamos sin spoilers que esperar de esta historia que transcurre en un viaje por la ciudad en taxi.

Un viaje en taxi

La trama de Un paseo con Madeleine es sencilla: una anciana pide un viaje por taxi hacia su nueva residencia de descanso para adultos mayores y, en el camino, a través de una charla, entablará una amistad con el taxista, un hombre que vive por inercia y enfadado la mayor parte del tiempo.

A primera vista, la película parece un cliché de cómo una plática con un taxista te cambia la vida, algo así como cuando Ajoloberto nos cuenta las historias de la CDMX; pero el encanto de esta cinta no radica en su historia, sino en cómo la narran.

La narrativa te lleva por los recuerdos de Madeleine, una anciana de 92 años quien, durante su viaje, le pide al taxista parar en ciertos lugares de París por donde pasó varias experiencias de su vida. Al principio, este mantiene una actitud seria y desinteresada, pero al conocer la vida de la pasajera, su interés y empatía hacia la anciana crece, dejándose llevar por el viaje, sus memorias y ocurrencias.

La película primero te hará reír, recordar las veces que tus abuelitos te querían contar su vida, y las pláticas que llegaste a tener con un taxista, para después salir de la sala del cine con los recuerdos a flor de piel.

¿Por qué ver Un paseo con Madeleine?

La vida de Madeleine puede ser la vida de cualquier mujer. No es necesario que hayas pasado por las mismas experiencias que la protagonista, pero la manera en que la película cuenta su historia te lleva a empatizar y ver tu vida reflejada a través del personaje.

Otro detalle del filme es que lleva un fuerte mensaje contra la violencia de género. La cinta no necesita ser explícita para darlo, basta un recuerdo, una plática como en la vida real, para darnos cuenta de lo que sucede a nuestro alrededor. Además, la película nos invita a escuchar a los demás y a nosotros mismos a través de la retrospectiva.

Esta película es como una road movie, pero filmada en los barrios de Paris. Además, la actriz Line Renaud, quien interpreta a Madeleine y es una activista contra los prejuicios relacionados con el sida en Francia; y el actor Dany Boon, quien da vida al taxista, en la vida real comparten una calurosa amistad; por lo que entendemos que hagan tan buena mancuerna en pantalla.