La cartelera de agosto inicia fuerte con el estreno de Exorcismo este 1 de agosto, una cinta de terror cuya premisa inicial es el tradicional rito de expulsión de un demonio y el heroico sacerdote al que se enfrenta, pero logra darle un giro a la trama que resulta en una historia sobre la maldad del alma humana.
Aqui en Chilango nos lanzamos a verla y te contamos lo chido, lo rifado y lo chafa de la película, para que te lances a verla mientras pasa la lluvia de la CDMX.
Una filmación que sale mal
Exorcismo, película protagonizada por Russell Crowe ―ojo: no porque sea el mismo actor en una sotana significa que esta cinta es la continuación de El exorcista del papa, porque no lo es― sigue la historia de Anthony, un actor mayor que en su juventud se vio envuelto en adicciones después de perder a su esposa por cáncer, causándole un distanciamiento con su única hija y mucho remordimiento.
La historia arranca cuando Anthony audiciona para conseguir el papel de un sacerdote en una película sobre exorcismos; sin embargo, pese a tener el apoyo directo de su hija, la presión del director desatará varios demonios internos en el protagonista para atormentarlo y llevar su alma al límite de la perdición.
Y cuando hablamos de “demonios internos” no nos referimos a un ente malvado, sino a varias heridas y traumas que lo harán susceptible a Molech, el demonio que ronda la filmación de la cinta. La historia sobre cómo filman una película de un exorcismo, termina en un caso verdadero, pero sin convertir al demonio en el villano de la cinta.
Como dirían las madres mexicanas: “ver películas de terror atrae demonios y abre portales” Y la película explota esta idea junto con el mito urbano de que en cada filmación de películas de terror siempre ocurren eventos paranormales. ¿Realmente crees que se abran portales cuando vemos o producimos cintas de terror inspiradas en demonios reales?
La película Exorcismo también cuenta con las actuaciones de Chloe Bailey, Ryan Simpkins y Sam Worthington bajo la dirección de John Miller tiene un aura oscura y, como dato curioso, el demonio Molech que ronda la filmación es real para la mitología hebrea.
Lo chido, lo rifado y lo chafa de Exorcismo
Lo chido es que Exorcismo sí te asusta. Te mantiene atento con las escenas a media luz y uso del screamer, pero bien llevado. Además, la historia es original, pues contar lo que pasa dentro del set de filmación, lo cruel que llega a ser el director y los abusos que nos llevan a perder la fe resultan ser más los protagonistas que el mismo demonio, quien en esta historia es más un invitado.
Lo rifado es que para crear al demonio de la cinta, sí usan datos históricos sobre el mito hebreo del que surge la entidad (lo puedes googlear después de ver la peli para corroborar). También los efectos están bien realizados, además de que la historia te genera miedo y hasta paranoia si eres muy creyente de las entidades oscuras.
Lo chafa es que la historia resulta un poco enredosa al final y muy abrupta en la forma de solucionar los problemas. La cinta es corta y, aunque se agradece no mantenerte sentado tanto tiempo, parece que faltó tiempo en pantalla o que el guion forzó un final. Tendrás que verla para juzgarla.