Sean Baker (Red Rocket, 2021), conocido por su habilidad para retratar vidas de personajes superprofundos y humanos, regresa con Anora, una obra extraordinaria que entreteje elementos de comedia, romance y drama social en un contexto tan real como desgarrador. Te contamos por qué debes verla, la razón más poderosa es porque fue galardonada con la Palma de Oro en Cannes 2024. ¡Es peliculón!
¿De qué trata Anora?
En Anora, Baker explora las complejidades del amor, el poder y la clase social a través de los ojos de Ani. El personaje lo interpreta de manera impecable Mikey Madison (Scream 5), quien se convierte en el corazón y el alma de la película.
Ani, una stripper de Brooklyn, sueña con escapar de su precaria realidad. Parece encontrar su oportunidad cuando conoce a Ivan (Mark Eydelshteyn), el hijo de un poderoso oligarca ruso que vive en Nueva York. Lo que empieza como un encuentro casual se convierte rápidamente en un matrimonio impulsivo en Las Vegas. Pero, como en todo buen cuento, los obstáculos no tardan en aparecer, y la familia de Ivan interviene para desmantelar lo que considera una unión inapropiada.
Baker no se limita a contar una historia de amor. Lo que hace en Anora es diseccionar las tensiones inherentes a las relaciones que trascienden las barreras sociales y económicas. A través de Ani e Ivan, el director construye un contraste entre dos mundos que no solo chocan, sino que exponen las heridas y las inseguridades de ambos protagonistas.
Ani, quien trabaja como escort para sobrevivir en la vorágine de Brooklyn, encuentra en Ivan un destello de esperanza, una posibilidad de escapar del ciclo de precariedad en el que vive. Por otro lado, Ivan ve en Ani una oportunidad de rebelarse contra el control asfixiante de su familia. Pero el choque de estos dos mundos no produce la magia de un cuento de hadas. Al contrario, desata una serie de conflictos que revelan la fragilidad de sus sueños y las profundas desigualdades que los separan.
El guion, también escrito por Baker, se mueve con fluidez entre momentos de humor sarcástico y otros de gran tensión emocional. Sin recurrir a sentimentalismos fáciles, construye una narrativa que es sincera, pero desgarradora. No, no es una típica historia de amor con final feliz.
Mikey Madison y Mark Eydelshteyn lo hacen impresionante en Anora
Mikey Madison brilla como Ani, con una actuación matizada que combina vulnerabilidad y fortaleza. Su interpretación captura cada momento de duda, esperanza y dolor de su personaje, lo que la convierte en una figura inolvidable. Por su parte, Mark Eydelshteyn ofrece una interpretación convincente como Ivan, un joven atrapado entre el lujo de su origen y el vacío emocional que este le ha dejado. La química entre ambos se siente a través de la pantalla.
El elenco secundario, que incluye a Alekséi Serebryakov como el frío y calculador patriarca ruso, agrega profundidad a la historia. Los escenarios, filmados con una impecable fotografía por Drew Daniels, alternan entre la crudeza de Brooklyn y la opulencia de los entornos en los que se mueve Ivan. Este contraste visual enfatiza las diferencias de clase y estilo de vida, metiéndonos en los universos opuestos de los protagonistas.
¿Por qué no puedes dejar de ver Anora?
Lo que distingue a Anora de otras películas que abordan temas similares es su disposición a subvertir las expectativas. Aquí no hay finales de ensueño ni soluciones perfectas. Enfrenta la realidad de que, a veces, las diferencias sociales y personales son insuperables. Ani, al final, elige su dignidad y su autonomía por encima de una relación que, aunque cargada de amor, no puede ofrecerle el futuro que necesita.
Baker plantea una reflexión sobre el precio del amor y el sacrificio, pero también sobre el poder destructivo de las dinámicas de poder y el dinero. A través de esta historia, la película despoja al cuento de hadas de su brillo superficial para exponer su núcleo más humano, donde los sueños chocan con la realidad y las elecciones dolorosas son inevitables.
Si buscas una experiencia cinematográfica que te haga reflexionar, conmoverte y cuestionar las dinámicas de poder y amor en las relaciones humanas, Anora es una cita obligada. Se estrena el 16 de enero en las salas de cine.
