Lo mejor de las películas previas a Infinity War
El Universo Cinematográfico Marvel corona uno de los proyectos más ambiciosos en la historia del cine con Avengers: Infinity War, la película que amarra las historias y los personajes de 18 filmes previos rumbo a un evento sin precedentes, que está rompiendo récords de taquilla. No podía hacer menos que volver a ver cada una de esas 18 películas (en el orden del desarrollo de la historia, no de su estreno en cines), con el fin de recordarte por qué valió la pena tanta hora-glúteo pegado a la butaca. Ahí va mi resumen (lleno de cafeína y comida chatarra) de las películas previas a Infinity War.
Capitán América: El primer vengador (2011)
La quinta película nos remonta a los años formativos de Steve Rogers (Chris Evans), un enclenque pero valeroso aspirante a soldado que tiene que recurrir a una poderosa droga capaz de hacerle desarrollar una musculatura y una fuerza imponentes. En vez de usar ese fortachón cuerpo para ganar la Tour de France, Rogers se convierte en el heroico Capitán América y le rompe la progenitora a Red Skull y a la siniestra organización Hydra. Los villanos pelean por un objeto llamado «Tesseract», que contiene una de las (música dramática)… ¡GEMAS DEL INFINITO! Si quieres ver todas las películas previas a Infinity War, empieza por esta.
Iron Man (2008)
Aquí fue donde comenzó todo. También fue donde los ejecutivos de Disney dijeron «hay que comprar Marvel por el precio que pidan, estas propiedades intelectuales son como una licencia para imprimir lana». Tony Stark (Robert Downey Jr.) es un genio de la tecnología, billonario excéntrico, mujeriego encantador, borracho arrogante y filántropo egocentrista. Podría haber constituido el candidato ideal para la presidencia de México, pero como es gringo mejor decide hacerse un traje metálico y ponerse a combatir al mal. En la escena post-créditos descubrimos a Samuel L. Jackson como Nick Fury, el enigmático director de la organización secreta S.H.I.E.L.D., quien nos habla de la «Iniciativa Avengers». De las películas previas a Infinity War, ésta es la primera en estrenarse en cines.
Iron Man 2 (2010)
Narra los acontecimientos inmediatamente posteriores a la primer Iron Man, y es un auténtico cochinero narrativo. Más que una historia en sí —como la mayoría de las películas previas a Infinity War—, es una especie de presentación de personajes y situaciones que se concretarán en la primer peli de Avengers. Confórmate con las habilidades en combate cuerpo a cuerpo de Natasha “Black Widow” Romanoff (Scarlett Johansson). ¡Ah, otra cosa! Terrance Howard, el actor que encarnaba a James Rhodes (quien eventualmente se convertirá en “War Machine”), fue remplazado por Don Cheadle. También es un gran actor, pero fue de las cosas raras de esta entrega, que fue muy pesada de ver. Lo que sí me emocionó fue el recuerdo de la escena post-créditos… ¡es el martillo de Thor!
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Hulk, el hombre increíble (2008)
Se estrenó el mismo año que la primer Iron Man… y se siente tan distantes y desconectados como Cardi B de Angela Merkel. Es bien sabido que Edward Norton y su ego le arrebataron la película al director Lois Leterrier y que reescribió el guión original de Zak Penn. El caos se refleja en el producto final. Edward Norton fue un muy mal Bruce Banner, algo que Disney no tardó en remediar para las siguientes películas previas a Infinity War. La única conexión clara con el MCU es una escena post-créditos con la presencia de Tony Stark.
Thor (2011)
Quizá la elección de Kenneth Branagh como director no fue la más apropiada para presentar a uno de los personajes más poderosos del MCU. Su enfoque fue sobre la relación entre el Dios del trueno (Chris Hemsworth) y su manipulador medio hermano Loki (Tom Hiddleston). A muchos les hubiera gustado ver más del aguerrido Thor en combate, en vez de verlo atropellado dos veces por Natalie Portman. Sin embargo el producto final resulta entretenido. Además, conocimos a personajes como Hawkeye (Jeremy Renner) y Heimdall (Idris Elba), pero no hay que engañarse: el más relevante fue Loki, pues se convertirá en el villano principal de…
The Avengers: Los Vengadores (2012)
Ahora sí, déjense venir de 10 en 10: Iron Man, un recién descongelado Capitán América, Nick Fury, Black Widow, Hawkeye y el nuevo Hulk (Mark Ruffalo) se unen por primera vez contra un enemigo común (de las películas previas a Infinity War, esta fue el primer cross-over relevante). Loki porta un cetro que contiene una de las gemas del infinito, misma que le fue confiada por Thanos (el villano detrás de toda esta larga saga) con algún fin que en ese momento aún no estaba del todo claro. Hay que decirlo: toda esta película es una gozada, y digmos que le firmó un cheque en blanco a Marvel/Disney para hacer toda clase de ensayos de cara al futuro.
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Iron Man 3 (2013)
Este filme da inicio a la llamada «fase dos». Desconcertó a muchos respecto a quien era el villano auténtico de la historia, pero establece el nuevo paradigma surgido en la Tierra a partir de los eventos de The Avengers. Tony Stark padece de estrés post-traumático, su imperio está en riesgo de derrumbarse y su eterna secretaria/amante Pepper Potts (Gwyneth Paltrow) encuentra un pretexto para pelear contra el malo (Guy Pearce) vestida con un atuendo para hacer yoga. Sí, es bastante malita. La escena post-créditos incluye un gracioso diálogo entre Bruce Banner y Tony Stark, pero hasta ahí.
Thor: Un mundo oscuro (2013)
Thor y Loki vuelven a las andadas, pero la película es un lío. Tiene uno de los villanos más olvidables del MCU (Christopher Ecclestone como Malekith), hay poco rescatable. Sin embargo, vemos la manifestación física de una tercera gema del infinito en el Éter. Que donde quiera se “meter”. Y a las mujeres “someter”. A ver, mi pésimo chiste que integra una canción de Alex Lora al MCU no es mucho peor que la trama de esta película, así que ni se quejen. Al final vemos que emisarios de Asgard (el terruño de Thor) le entregan el dichoso Éter al Coleccionista (Benicio Del Toro), pues «no es seguro tener dos gemas del infinito en un mismo lugar». ¿Por qué? Porque RAZONES, por eso.
Capitán América y el Soldado del Invierno (2014)
Tras dos entregas medianonas en las películas previas a Infinity War, los fans del MCU estaban empezando a dudar de la infalibilidad de Disney. Por fortuna llegó esta joyita, que combina elementos del cine moderno de superhéroes con clásicas tramas de espionaje e intriga política. Vemos la reaparición de Bucky Barnes (Sebastian Stan), viejo compañero de armas del Capitán América durante la Segunda Guerra Mundial, y a quien muchos creían desaparecido. ¡Sorpresa! No estaba muerto, andaba de «lavado de cerebro» con los malos de Hydra. La acción es espectacular, aparece el nuevo héroe Falcon (Anthony Mackie) y una escena post-créditos nos muestra a dos personajes relevantes para el futuro: Quicksilver (Aaron Taylor-Johnson) y Scarlet Witch (Elizabeth Olsen).
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Guardianes de la Galaxia (2014)
Nadie esperaba gran cosa de este filme, que de pronto se metió de lleno a la conversación sobre la entrega más brillante de la serie cinematográfica a la fecha. El grupo de atípicos héroes liderados por Star-Lord (Chris Pratt) lograron un balance perfecto entre acción y humor. Vimos un poco más del temido Thanos (ahora sí con la voz de Josh Brolin), se reveló otra gema del infinito… ¡y ese soundtrack, mi lic!
Guardianes de la Galaxia Vol. 2 (2017)
Aunque tres años separan esta producción de su predecesora, son historias consecutivas en la línea de tiempo. En esta ocasión el antagonista es Ego (Kurt Russell), un ser inmortal con el poder de generar y destruir planetas enteros. Es bueno saber que este formidable villano fue derrotado por un grupo compuesto de un cazafortunas, una asesina, un guerrero en pos de venganza (que no entiende de metáforas), un mapache experto en armamento, un árbol con vocabulario limitado, una asistente personal con poderes telepáticos y una cyborg… pues esto significa que Thanos no la tiene del todo ganada.
Avengers: Era de Ultrón (2015)
Aquí notamos por primera vez que a los productores se les podía hacer bolas el engrudo con tantos personajes y líneas argumentales. El villano robótico (en voz de James Spader) es medio cutre, pero aparece Vision (Paul Bethany) y vemos a Thanos en una escena post-créditos luciendo el temible guante del infinito, al que solamente le faltan las correspondientes joyas para constituirse en el arma más devastadora del universo. Sin duda esta cinta es clave entre las películas previas a Infinity War.
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Ant-Man (2015)
La fase dos culmina con una peli «chiquita» para los estándares del MCU. Sin embargo, esreferencial y entrañable gracias a la interpretación que hace Paul Rudd del personaje titular. La presencia de Michael Douglas como el brillante científico Hank Pym abre muchas otras posibilidades en torno a historias que pueden explorarse en este universo de superhéroes. Pura diversión sin demasiadas pretensiones, además de incluir un hilarante combate entre Ant-Man y Falcon en el cuartel de los Avengers.
Capitán América: Civil War (2016)
Otra candidata fuerte a la mejor película del MCU. No solamente tenemos a los héroes más grandes sobre la tierra divididos en bandos opuestos, también nos presentan a Black Panther (Chadwick Boseman). Además, Disney negoció con Sony para tener a Spider-Man (Tom Holland) presente en esta magna confrontación. La «batalla en el aeropuerto» se ha convertido en una escena icónica del cine de superhéroes, y la película en su conjunto es tan brillante que casi le perdonamos un villano tan flojón como el Zemo (Daniel Brühl). La fase tres comenzó con el pie derecho.
Doctor Strange (2016)
Una de las cartas más difíciles de jugar para los estudios Disney era la integración de los elementos mágico-espirituales de este personaje emblemático de los cómics. Sin embargo, la presencia de Benedict Cumberbatch en el rol titular resultó una apuesta ganadora. Posee la vena sarcástica de Tony Stark, la arrogancia de Thor y el encanto ególatra de Loki, pero de alguna manera todo converge en un personaje que aprende a pasos agigantados su significación dentro de este universo sui generis. Strange es quien descubre otra de las gemas del infinito y decide resguardarla… así que es lógico esperar que Thanos decida pasar a visitarle muy pronto. Otra clave entre las películas previas a Infinity War.
Thor: Ragnarok (2017)
El director neozelandés Taika Waititi entendió a la perfección el tono de comedia de acción que debía poseer un filme protagonizado por Thor, Loki y Hulk. Cate Blanchett robó cámara como la villana Hela y vimos la destrucción a gran escala de Asgard, así que intuimos la magnitud de devastación que nos tienen preparada para la inminente entrega de Avengers. Hubo quienes no apreciaron el tono ligero y la abundancia de chistes, pero el filme es un gran acierto y una muestra de que se pueden ensayar otras fórmulas narrativas dentro de un género que no siempre responde bien a la innovación. La estética setentera también se aprecia, ¿eh?
Spider-Man: De Regreso a Casa (2017)
La integración definitiva de esta encarnación de Peter Parker y su alter ego arácnido al MCU. Es un gran balance entre la inocencia de juventud del atolondrado Parker y sus aspiraciones de heroísmo a través de la mentoría del ubicuo Tony Stark. Hay que destacar al magnífico villano representado por Michael Keaton, y aunque no aporta demasiado a la trama —que nos dirige hacia Infinity War—, el filme sí está lleno de referencias a los hechos ocurridos en entregas previas y su impacto en la sociedad civil.
Black Panther (2017)
¿El cine de superhéroes como comentario social? Un poco, sí, pero sería injusto pensar que el elenco (en su mayoría compuesto por actores de origen africano) es la innovación primordial de este filme. La historia es sólida, con tintes de Shakespeare y referencias a tradiciones ancestrales de África. El villano (Michael B. Jordan) tiene una motivación clara y una dimensión humana que nos hace pensar dos veces en su proceder. Y el héroe (Chadwick Boseman) no es una entidad omnipotente, sino un ser capaz de equivocarse, de dudar sobre sus propios méritos y de encontrar la redención con la ayuda de terceros. Sumémosle lo bien escritos que están los papeles femeninos (ellas patean traseros en esta historia, ¡y de qué forma!) y tenemos la respuesta al porqué la película detonó con todo en la taquilla. Sí, me quiero ir a vivir a Wakanda, sobre todo después de ver el último debate presidencial.
En fin, ya vi TODAS las películas previas a Infinity War. Ahora voy a ver algún documental polaco sobre alfarería porque ya hasta en sueños se me aparece Stan Lee haciendo cameos…
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Avengers: Infinity War (2018)
Listo. Terminamos con todas las películas previas a Infinity War. Ahora: ¿dónde están las gemas del infinito que nos falta descubrir?, ¿en realidad Thanos es tan poderoso como parece?, ¿quiénes de los personajes que amamos no van a cargar los peregrinos este año? Si no has visto Avengers: Infinity War, te dejamos esta crítica sin spoilers. Si ya la viste, pásale a leer la crítica con spoilers. Tú decides.